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Todos le decían que lo supere, que ya había pasado un año y que él se seguía aferrando a simples recuerdos pero olvidarlo le era imposible, no podía hacerlo, no cuando cada que iba a la universidad pasaba por el parque donde se dieron su primer beso, no cuando entraba a su casa y absolutamente todo le recordaba a él, no cuando el ambiente que solía estar lleno de mimos y amor ahora sólo lo llenaba frío y soledad.

Lo extrañaba.

Fue una parte muy importante en su vida y lo sigue siendo, aquello nunca cambiaría.

- Jisungie, me gustas

Y allí estaban de nuevo esos flashbacks que no parecían querer dejarlo en paz. Cruzar aquel parque era demasiado peligroso o al menos Jisung lo llamaba así, era como si una ola de sentimientos y recuerdos lo invadiera por completo con el objetivo de destrozar la poca estabilidad emocional que le quedaba luego de lo sucedido.

Pero aún así a jisung le gustaba recordar incluso si se hacía daño a sí mismo.

Y esa era la razón por la que se encontraba allí sintiendo la dulce brisa de verano recorrer su cuerpo, al igual que aquel día...

- Jisungie, me gustas - dijo rascándose la nuca con nerviosismo - y... me gustaría intentar algo contigo. Claro, si quieres - añadió hablando tan rápido como si el tiempo le fuese demasiado corto.

- Yo... - mentiría si dijese que no estuvo esperando por este momento, para él esto parecía un sueño demasiado lejos de ser realidad, no podía creer que esto de verdad esté pasando.

- Está bien - dijo en un tono un tanto desanimado, minutos pasaron y el silencio hizo que asumiera una respuesta negativa - perdón si te incomodé.. - agachó su cabeza antes de dar media vuelta a punto de irse del aquel parque.

Nunca esperó sentir unas manos posarse en su rostro mucho menos esperó sentir aquellos labios junto a los suyos a tan pocos centímetros de cerrar ese pequeño espacio.

- También me gustas y... acepto - dijo con una leve sonrisa en su rostro antes de cerrar aquel espacio sellando los labios con los suyos en un beso que jamás olvidaría.

Los pétalos cayendo alrededor de ambos, nada más importando aparte de la comodidad que los rodeaba y la felicidad que los llenaba .

Aquel fue el fin de su amistad pero fue el inicio de su relación, de días llenos de alegría y amor o eso era lo que ambos pensaban.

- Te extraño - susurró, volviendo al presente, contra aquel tronco donde ambos habían tallado sus nombres - ¿Esto no fue un poco cursi? - preguntó sabiendo que esta vez ya no recibiría respuesta alguna porque ya nadie se encontraba a su lado.

- Mmh, tal vez pero tú quisiste hacerlo - escuchó una leve risa a lado suyo.

Esa voz...

Esa risa...

Era imposible no diferenciarlas.

- ¿Minho..? - preguntó tan pronto como volteó encontrándose de nuevo con aquel rostro sonriente que tanto amaba.

- ¿Acaso ya no me reconoces? - hizo un leve puchero en modo de broma.

- Bebé... ¿Qué haces aquí? - preguntó atónito al verlo frente a él.

- Tú me llamaste - respondió alzándose de hombros pero al notar la expresión confundida de su "ex novio" solo se limitó a mover sus manos en señal de que no importaba.

¿Cómo es que él estaba allí? Al frente suyo cuando en realidad él estaba..

- En fin ¿A dónde vamos? 

Paseo de recuerdos [MINSUNG]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora