Capítulo 1- El torneo de la lucha infantil

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   Cada dos años, en La Tierra se celebra un torneo internacional de lucha. Peleadores de todo el mundo se reunían, mostrando sus estilos tan distintos, donde sólo uno sería el vencedor. Este torneo, creado hace 15 años atrás por alguien increíblemente poderoso era en principio para probar quien de todos era el más fuerte. Hoy en día, la mayoría de la gente que participa es solo por el premio en dinero que dan al vencedor. Los únicos que verdaderamente disfrutaban era el público. Tanto así, que el actual presidente del torneo decidió hacer uno versión infantil, donde niños pequeños pelearán para ver quien era el más fuerte de su edad. Repugnante ¿No creen? Pero a veces, presentaba una verdadera oportunidad. El premio para los niños de cada categoría era, igualmente, dinero. Una cantidad mucho menor que la de los adultos, pero al menos entre los infantes abundaba más la idea de divertirse.

   En esta primera edición del torneo, habían un total de 57 niños de entre 10 y 17 años, las edades permitidas para participar. Habían muchos, pero 16 de ellos serían vistos por el público pelear en las finales. Se dividieron en dos bloques: de 10 a 13 y de 14 a 17. De cada bloque seleccionarían a los 8 mejores, y luego de entre ellos los dos ganadores del primer torneo infantil.

   Había mucho revuelto dentro del lugar donde serían las eliminatorias del bloque 10-13. Tantos niños revoltosos e hiperactivos en un solo lugar no era una buena idea. Aunque no todos eran niños, entre todos ellos podía verse una pequeña faldita ir de un lado a otro, preocupada. Esta pequeña niña de pelo morado largo y ojos azules buscaba algo entre la multitud. Su pequeña blusa roja sin tirantes y falda del mismo color destacaba mucho entre la multitud de varones del lugar

-Oigan ¿Han visto una bolsita morada por aquí? Díganme que siiii- Por más que preguntara, la mayoría de los niños la ignoraban. Los pocos mini-caballeros que habían no sabían nada de su cartera. Ella ya tenía doce años, no iba a llorar por eso, pero... -
-... Oye ¿Eres tu la que busca una carterita roja?- La niña volteó al oír esa voz afeminada. Le pertenecía a otra niña como ella. Lo primero que vió en ella fue el trapo viejo que llevaba como vestido. Luego se fijó en su cara y su pelo, el cual era negro y largo. Sus ojos, lejos de ser como su pelo, eran de un verde singular. Pero el contraste que estos hacían con la suciedad de su cara era pésimo -
-Uhhh... ¿Si?-
-Toma- La niña harapienta le entregó algo rojo, era su cartera. La peli-morada se la arrebató de las manos y la sostuvo contra su pecho con fuerza -
-¡Mi cartera! ¡Gracias, gracias, gracias, gracias!-
-Ji ji- La otra niña soltó una pequeña risita mientras ponía las manos en su espalda y se contoneaba un poco
-... Yo soy Ymena ¿Eres candidata para el torneo de lucha infantil?-
-Sipi ¿Y tú?- Ymena asintió -¡Wow! ¡Pensé que era la única niña compitiendo!-
-Ya somos dos-
-... Literal- La peli-morada se rió, mientras la oji-verde la miraba confusa sin entender su propio chiste -

   Entonces, por los altavoces del lugar comenzó a sonar un anuncio: "Todos los participantes, favor de ir donde los organizadores para que reciban su número. Se harán batallas simultáneamente en distintas plataformas. Si tienen dudas de a qué plataforma ir, consulten su número con el panel de la pared. Eso es todo. Que se diviertan". Ambas chicas oyeron el mensaje, y juntas se dirigieron hacia los organizadores. Tuvieron que hacer una cola larga mientras los otros se preparaba para luchar. Finalmente llegaron y a las dos les tocó un número.

-¿Cual es el tuyo?- Preguntó Ymira, ambas frente al panel dónde especificaban qué números se enfrentaban en cada plataforma -
-... El mío es el 15 ¿Y tú cual tienes?-
-¡El 32! ¡No pelearemos en el mismo bloque! ¡Yaaay!-
-Pero pelearemos en los finales... ¿Verdad?- La otra chica se veía emocionada -
-¡Tenlo por seguro! A menos que pierdas aquí...-
-¡No voy a perder! Y espero que tú tampoco-
-¡Ja! ¡No sabes con quién estás hablando!-
-... Creo que sí lo sé. Eres Ymira ¿No?-
-Ah... e-es Ymena, por cierto-

   Ambas siguieron platicando hasta que llamaron a la oji-verde a pelear. Se despidió un momento para subir a la plataforma a pelear. Todos la miraron impresionados, Ymena no sabía si era por ser niña, o por los harapos que traía, quizás ambos. La pelea comenzó y le tocó contra un niño de anteojos gigantes. Ella se quedó quieta, si acaso se puso un poco de lado. El niño, nervioso e impaciente, cargó contra ella rápidamente. Cuando intentó golpearla, la niña atrapó su brazo con sus dos manos, volteó y utilizando su espalda lo levantó, luego utilizó su propia fuerza para lanzarlo de la plataforma. Aquello indicaba que el niño había perdido. Todos se quedaron impactados, Ymena la veía con emoción, su nueva amiga había ganado y era habilidosa. Eso le haría más difícil ganar el premio, pero la emocionaba.

   Su turno también llegó, y ahora le tocaba luchar contra un niño de aspecto adinerado. Al principio trató de comprarla con dinero, pero Ymena no lo aceptó. Es más, le indignó tanto que intentara sobornarla que le tumbó de la plataforma de una sola cachetada. Con mucho coraje bajó de allí y se dirigió con su nueva amiga, la cual tenía brillo tos en los ojos y no paraba de decir lo fuerte que era. Ambas, las dos únicas niñas en esa primera edición del torneo, eran muy fuertes y de temer...

Saiyan Girl~ 1er Arco ~El Torneo De Lucha Internacional InfantilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora