»»-----Cuarto Capitulo-----««

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Ehh, muchas gracias a las personitas que me dijeron palabras muy bonitas. Realmente me anima.

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Giulia me arrastra hacia el árbol, donde estaba Alberto y Luca hablando, ella se pone en medio de los dos con una sonrisa interrumpiéndolos, yo solo me siento en la rama que da un tipo de camino hacia nuestra habitación.

-A ver chicos, hoy estuvo bien, pero hay que hablar de la estrategia-Dice con una sonrisa mirándolos, yo solo me recuesto en la rama suspirando-

-Eh, ragazzi, necesito ayuda con las redes, tu.. el grande y fuerte-Dice el señor Massimo abriendo la puerta, Alberto sonríe y baja de un salto-

-Ahora vuelvo- Menciona mientras sigue al mister Massimo, ya al irse, miro como Luca y Giulia se recuestan y empiezan a hablar ignorando completamente mi existencia, hago una mueca molesta y entro a la casa, bajando a la cocina, donde siempre encuentro a Machiavelli, quien estaba sentado aburrido en el sillón, me acerco por detrás y le acaricio la cabeza-

Lo tome en mis brazos y comencé a hacerle mimos, mientras ronroneaba, sonreí. Después de un rato escucho pisadas en el tejado, sabiendo quienes eran, lo ignore, escucho el sonido de la puerta, veo como Alberto entra un poco decaído.

-Heya, ragazzo di mare- Le saludo, el se sorprende y me mira-

-Ah! ____, eres tu, has visto a Luca?- Me pregunta con una sonrisa-

-Ah, Luca, si, el esta con Giulia, creo que le fue a mostrar el telescopio-Digo dudosa-

-Oh- Su mirada se apaga un poco, dejo al gato a un lado y le tomo por sus mejillas, ladeo la cabeza-

-Que te pasa?-Digo preocupada, el se sonroja-

-Na-nada!-Exclama nervioso, fruncí el ceño- Te digo que nada, calma..-

-Te conozco desde hace ya meses, Alberto, que es lo que sucede..?-Pregunto con los ojos entrecerrados, el respira un poco con una mueca nerviosa, y se queda callado acerco mi cara hacia el, el solo se sonroja mas- Hmm..-Me separo de el cruzándome de brazos molesta, el suspira-

-No te enojes..-Doy media vuelta subiendo la cabeza como si estuviera ofendida, el se preocupa y se coloca delante mío- Como hago que ya no estés enojada- Dice con cara de perrito abandonado, me sonrojo y miro a otro lado- Vamos, carino, que hago para recompensarte-

-Hmm un besito en la mejilla-Respondo con una sonrisa burlona, sé que no lo hará, se sonroja rápidamente-

-Q-que-Queda perplejo y se queda totalmente quieto, así que solamente me dirigí donde estaba el gato y comencé a darle mimos, si no fuera porque siento unos suaves labios en mi mejilla, abro mis ojos y veo atrás, viendo como Alberto sale corriendo torpemente hacia afuera, reí con un pequeño sonrojo-

(. . .)

Estaba ayudando al mister Massimo con algunas cosas que necesitaba guardar, ya que no había encontrado a Alberto, entonces yo me ofrecí a ayudarle. Ya al terminar el me agradece y da las buenas noches, me despido y subo arriba, para escuchar como Alberto llamaba a Luca para ir a algún lugar, curiosa, entre al cuarto, pero los chicos ya no estaban, y solo estaba Giulia, la cual se cae en el suelo al estar al lado de la puerta.

-Oh, ___!-Exclama con una sonrisa, la miro seria y me cruzo de brazos, ella frunce el ceño confundida-

-Literalmente me dejaste sola-Digo haciendo una mueca-

-Oh, perdón, es que, nunca había tenido un amigo varón y bueno- Yo suspiro-

-Esta bien.. Pero tenme en cuenta cuando hagan cosas divertidas, okey?-Respondo sentándome en mi cama, Giulia me abraza-

Ti Amo! Alberto x ReaderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora