2015
Hoy me levanté super emocionada porque es mi décimo cumpleaños, ahora y puedo decir que tengo dos números en mi edad, hoy me he levantado a las 7:00 de la mañana, treinta minutos antes de mi hora para ir al cole pero de la emoción no podía estar más tiempo quieta.Con los nervios que tenía porque era mi cumple no me acordé de preparame y cuando miré el reloj faltaban 20 minutos para entrar a clase y ya tendría que estar poniéndome los zapatos así que corrí a ponerme el uniforme y peinarme como sea.
Iba corriendo por los pasillos de mi colegio pensando que iba a decir al profesor de literatura por llegar tarde el día de mi cumpleaños. Porfin llegué a la clase de quinto B pero no me atrevía a tocar la puerta. Cuando conseguí reunir el valor de tocar la puerta, una cabellera gris se asomó dejando ver al profesor sffenjey, de normal es alegre nunca lo puedes ver sin una sonrisa dibujada en su cara pero esta vez no podía ver esa sonrisa, en verdad no podía saber que expresión tenía porque estaba un poco serio pero no tanto para decir que estaba enfadado.
-Casilla, ¿otra vez llegas tarde? Encima el día de tu cumpleaños.-Me dijo el profesor sffenjey.
-Puedo explicarlo profesor,¡Lo prometo!-intente excusarme.
-Hoy te dejo pasar porque es tu cumple pero no más, anda pasa.- Me respondió.
No le dije nada y pasé al aula, antes de que pudiera reaccionar todos mis compañeros estaban de pie al fondo de la clase sujetando un cartel grande que ponía:
¡¡¡Feliz cumpleaños Naye!!!!
Me quedé boquiabierta ante la situación en la que estaba, estaba muy contenta de que se hubieran acordado de mí pero faltaba algo en mi cumple que hacía que no fuera tan especial,cada año deseo con todas mis fuerzas que mi padre me llamara el día de mi cumpleaños o se acordará de que tenía una hija o por lo menos que viniera a verme pero nunca pasaba así que este año como es el que hace que tenga dos dígitos en mi edad desearé otra cosa que también quiero con todas mis ganas.
Salí de las clases a las 14:10 como de costumbre, hoy venían mis abuelos a comer con migo, son la única familia que tengo en Francia,después de comer iremos a pasar la tarde en Disneyland con mi mejor amiga Lindsay.
Llegó el momento de soplar las velas y deseé con todas mis fuerzas tener un hermanito o hermanita, nunca es tarde para desearlo,ahora llegaba la parte más deseada:la hora de abrir los regalos.
-Toma cariño, este es de parte del yayo y yo-dijo mi abuela poniéndome un enorme regalo en mi regazo.
-caramba yaya, que grande es, muchas gracias.
Con una ilusión bien grande abrí mi regalo dejando ver una enorme caja de Playmobil y era el hospital de Playmobil,yo quiero ser cirujana y llevaba tiempo detrás de ese hospital porque me encanta la medicina.
-¡Dios mío,no me lo creo!Muchísimas gracias yayos.-grite mientras les daba un abrazo
-Eso no es el único regalo que tenemos para ti, toma, abre esto-me dijo mi abuelo mientras me entregaba un sobre.
-Muchas gracias-dije mientras cogía el sobre.
Lo abrí y eran tres boletos de avión con destino a España,no me lo podía creer. Siempre he querido saber sobre mi origen y la familia de mi madre también es de España así que siempre he querido ir allí.
-¡Madre mía, que alguien me pellizque porque creo que estoy soñando, esto es un sueño no es de verdad!- grité mientras daba saltos de alegría.
-Siempre has querido saber qué es de tu origen y tus familiares y como ya tienes dos cifras puedes ir.- me dijo mi madre.
-Muchas gracias, pero solo hay tres boletos y somos cuatro- respondí extrañada.
-Yo me quedaré aquí,tengo cosas que hacer cariño,tu pásatelo muy bien.-dijo mi madre.
-Ahora tocan mis regalos.
-Se me habían olvidado con tanta emoción.
Mi madre me entregó una caja en forma de rectángulo y otra pero en forma de cuadrado. Primero desenvolvi la caja rectangular dejando ver una caja de móvil, exactamente un iPhone 6s ese móvil que quería.
-¡Madre del amor hermoso es un iPhone madre mía!-exclamé
Abrí la otra caja dejando ver un álbum de fotos, antes de que pudiera ver que había tras ese album mi madre dijo:
-Antes de que lo habrás ahí hay fotos que te darán pistas cuando vayas a España, no quiero que lo abras hasta que estés en el avión,¿Vale?
-Vale, de acuerdo.
-Lo siento mucho,este año tampoco se a podido cumplir el deseo que siempre pides al soplar la tarta.- se disculpó mi madre.
-Tranquila mami, este año he pedido otra cosa diferente,creo que ya saber lo que es porque siempre he querido tenerlo.
A la tarde, me reuní con Lindsay y su padre en las puertas de Disney,su padre trabaja ahí y vamos muy a menudo.
-¡Hola Lindsay!¿Que tal?-le dije mientras corría hacia ella.
-¡Hola!Muy bien, toma tu regalo.-Me respondió mientras me daba una bolsa de Mickey mouse.
-Muchas gracias tata.-Le dije mientras abría la bolsa.
Lindsay me regaló una pulsera con la que podía entrar a cualquier atracción sin hacer cola y treinta euros para comprarme lo que quiera.
-¡Muchas gracias, me encanta!En dos días me voy a España, como siempre he querido y me han regalado un iPhone 6s como el tuyo, ya podré llamarte para contarte todo.
Pasamos la tarde ahí y cuando llegamos ya era la hora de acostarse,al día siguiente tenía que hacer las maletas, iba a estar en España dos meses. Me acosté pensando si tal vez iba a conocer a mi padre pero no te.ia muchas ilusiones así que me fui a dormir.
Al día siguiente no hice gran cosa a parte de el equipaje.
