𝐶𝑟𝑜𝑠𝑠𝑒𝑠 | 𝑾𝒆𝒊𝒍𝒂𝒏 | 𝑮𝒖𝒂𝒓𝒅𝒊𝒂𝒏 𝑨𝑼.

𝐶𝑟𝑜𝑠𝑠𝑒𝑠

Zhao Yunlan sostuvo su cámara en mano mientras observa la enrome sala de reuniones. Justamente el día de hoy habían aceptado su solicitud de empleo para trabajar con la empresa Dixing.

Una gran empresa de actores, idols, cantantes y más personas talentosas con el mundo del entretenimiento. Zhao Yunlan no pensó que iba ser aceptado pero la buena suerte estuvo de su lado.

Zhu Hong la subdirectora de la empresa, le dijo que si quería conocer más la empresa podría hacerlo así que Zhao se armó de valor para ver cada rincón.

Es una persona curiosa y solo quiere hacerle caso a ese instinto aventurero.

—Que suerte, Si da qing se entera que conseguí el trabajo será como un chiste.— se burló de su amigo que también trabaja para fotógrafo.

—Vaya que esté lugar es enrome.— murmuro asombrado pero de repente un sonido llamo su atención y salió de la sala de reuniones.

El sonido lo guío a una habitación de música, entro con curiosidad a la habitación para oír esa bella melodía de piano.

Observó las grandes ventanas abiertas de la habitación, el sol del atardecer se asoma suavemente en su rostro mientras que las cortinas vuelan suavemente ante el aire.

Se llevó otra sorpresa al ver quién toca el piano de manera hermosa, puede ver un hombre de dedos delgados que tocan cada tecla con delicadeza.

Ojos oscuros, cabello negro atado en una pequeña coleta, piel pálida como porcelana, debido que es otoño el joven usa un gran saco negro, una camisa blanca de cuello largo y pantalones negros.

Ni hablar de su zapatos están demasiado limpios , Zhao ve su zapatos con algo de pena que olvida de repente.

Los zapatos llenos de tierra pero a él no le importa en absoluto el detalle. No quiere interrumpir al joven pero algo le dice que se acerque.

Se acerca a él, toma de nuevo su cámara para querer tomar una foto y luego se detiene por qué sabe que no es correcto tomar fotos sin el permiso de alguien.

—Demonios, nunca había visto una persona tan hermosa.. ¿No estaré soñando?— confundido se recargo en un escritorio que lo adornan con una montaña de libros.

—Al menos que sueñes con los ojos abiertos.— El hombre responde con una sonrisa que asusto al otro por ser descubierto y sin querer se cae.

Para el colmo sus manos torpes se llevo la montaña de libros junto con su cámara que cayó casi a los pies del hombre pelinegro.

—Lo siento, no fue mi intención espantarte.— el hombre de voz suave hizo que el otro se quedará casi bobo, tiene una voz hipnotizante y todavía eso lo hace más lindo.

Esta agradecido con el que sea que esté arriba por darle conocer semejante belleza y de paso le agradece también a su curiosidad.

El de saco negro se acercó y ofreció su mano para levantarlo, lo cual Zhao acepto la ayuda tomando la mano del joven de ojos oscuros.

Levantaron los libros en el suelo y dejarlos como estaban. El hombre de piel blanca le dio su cámara y Zhao la tomo con una risa apenada.

—Lo siento por entrar en tu espacio, solo que me pareció realmente bonita tu melodía en el piano y quise apreciar de cerca.— Zhao sonrió un poco pero no avergonzado en decir la verdad.

—¿Enserio?, estoy prácticando piano en estos días, me alegro que mis melodías esten tomando forma.—
El hombre de saco sonrió con suavidad y un poco avergonzado de que alguien haya escuchado.