𝗣𝗮𝗿𝗸 𝗦𝘂𝗻𝗴𝗵𝗼𝗼𝗻
Ese era el nombre de aquel chico que aborrecía con mi vida.
No importaba que era lo que hacía o si trataba de portarme bien, él siempre obtenía lo que yo quería sin importar si él se portaba peor que yo.
Lo detestaba, su maldita sonrisa arrogante cuando alguien lo halagaba y el mismo comentario de siempre "me halaga pero no es para tanto" siempre siendo tan modesto y educado.
Siempre siendo el tema principal y el "lo quiero como yerno" de la gran mayoría de las señoras que eran amigas de mi mamá y venían a casa con sus hijas de la misma edad de sunghoon o incluso mayores que él por no decir que de todas, siempre estaba en boca de todos, siempre siendo el ejemplo y el rostro de la familia.
No pensé que las cosas serían de esta manera, yo amaba a mis hermanos, claro que lo hacía pero cuando fuimos recogidos de ese orfanato por nuestra mamá, una pizca de esperanza de ser importante y querido en mi nueva familia golpeó mi cabeza, supongo que eso es lo que todo niño sin figura materna ni paterna desea antes que tener que pudrirse en un orfanato, más sin embargo por supuesto que no fue así.
Fue ahí donde mi perspectiva de las cosas comenzaron a cambiar.
"- No puedo comer solo un poco por favor~? Es de mi favorito además en mi cumpleaños no tuve pastel mamá-"
"- Ya te dije que no puedes, hoy es el día de Sunghoon, luego te compro uno te lo prometo -"
Palmeo mi cabeza y se perdió con Sunghoon entre el cúmulo de niños que estaban brincando felices con su pastel en la mano y gritándole "feliz cumpleaños" a Sunghoon.
Al final nunca me compraste mi pastel de cumpleaños como me lo prometiste.
Nunca me compraste ese carrito rojo que te pedí que me compraras en el supermercado y que sunghoon me arrebato de las manos pidiendo que se lo compraras a él.
Nunca llegaste a darme mi beso de buenas noches porque estabas ocupada en la habitación de sunghoon leyendole cuentos mientras yo te esperaba sentado en la orilla de mi puerta con mi oso de peluche en la boca intentando amortiguar mis sollozos para tratar de escuchar esas lindas historias que le leías a él y no a mi como tantas veces te pedí.
Mamá yo también quería que me acompañaras a jugar al jardín.
No sabes cuánto deseaba tener un cachorrito que me acompañará cada que lloraba por tu rechazo, que me diera besitos y lamiera mi rostro para sacarme una sonrisa pero en cambio le regalaste un cachorrito a Sunghoon alegando que yo no era lo suficiente responsable para cuidarlo.
Nunca me dijiste un 'te quiero' pero a Sunghoon siempre le decías un 'te amo' cada mañana, tarde y noche.
Sunghoon, Sunghoon, Sunghoon
Todo era él y solo élMe alejabas cada instante por mi defecto como tú le llamabas, me consideraban raro no solo afuera en la escuela si no también en casa y nunca estuviste para darme apoyo y decirme que todo estaba bien.
Solo tenía a una sola persona que me hacía sentir lleno pero deseaba que tú también fueras así.
"- Hyung! Hyung! Mira lo que tengo para ti! mamá no se dió cuenta, ven vayamos a nuestra guarida para comerlo! -"
Tomo mi mano y corrío llevándome a rastas a nuestro lugar secreto para que pudiera devorar un pequeño pedazo de pastel que me había traído del cumpleaños de Sunghoon."- Hyung deja de llorar, si sigues llorando también lloraré, si quieres puedes jugar con mis carritos! -" dijo con ojos brillosos mientras me extendía una caja llena de carritos, seque mis lágrimas y comencé a jugar con él entre risas y gritos.
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𝗘𝗹 𝗰𝗵𝗶𝗰𝗼 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗵𝗮𝗯𝗶𝘁𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝟭𝟮
Fanfiction"𝘌𝘳𝘦𝘴 𝘶𝘯 𝘱𝘴𝘪𝘤ó𝘱𝘢𝘵𝘢 𝘦𝘯𝘧𝘦𝘳𝘮𝘰" 𝘌𝘴𝘢𝘴 𝘱𝘢𝘭𝘢𝘣𝘳𝘢𝘴 𝘲𝘶𝘦𝘥𝘢𝘳𝘰𝘯 𝘨𝘳𝘢𝘣𝘢𝘥𝘢𝘴 𝘦𝘯 𝘮𝘪 𝘤𝘢𝘣𝘦𝘻𝘢 𝘱𝘰𝘳 𝘢ñ𝘰𝘴, 𝘦𝘳𝘢 𝘭𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘵ú 𝘴𝘪𝘦𝘮𝘱𝘳𝘦 𝘮𝘦 𝘥𝘦𝘤í𝘢𝘴. 𝘕𝘰 𝘴𝘢𝘣𝘦𝘴 𝘤𝘶𝘢𝘯𝘵𝘰 𝘥𝘪𝘴𝘧𝘳𝘶𝘵𝘦...