Pequeña historia... espero les guste.
El sonido del lápiz golpeteando contra la fria madera de perfecto escritorio de madera negra se escuchaba en toda la oficina. Ciertamente quedarse hasta altas horas de la noche era una tarea de la cual ya se había acostumbrado a cumplir, y no es que le molestara, absolutamente no. Simplemente le agradaba encender el clima lo más frio posible para lograr un estado de concentración más puro. El lugar estaba vacío, una tasa humeante de Blue Butterfly con un pequeño toque dulce, y su cálido saco gris lo abrazaban con delicadeza pero suficiente calor para no coger un resfriado. Si la oficina estaba sola haría más frío que cuando había personas en ella.
Min Yoongi siempre habia preferido aquellos días cálidos por la mañana y fríos por la noche, he ahí la razón por la cual preferia trasnochar. Hacia varias semanas que habia pedido al presidente de la empresa y amigo de la infancia Kim Seokjin que le permitiera incluso dormir en la oficina, y aunque al principio se nego termino por aceptar.
El motivo era simple, necesitaba conseguir esa promoción laboral e ir a la compañía hermana en Eslovaquia. Ser amigo del presidente no queria que influyera en la decisión de enviar a un representante coreano a tan hermoso país, sin embargo Yoongi creía que era una buena opción para poder conocer un lugar nuevo. Al menos por los 3 días que duraría la tan emocionante visita.
La tarea era sencilla, completar el informe sobre la empresa y los números financieros de esta, el problema era practicar el eslovaco o al menos traducir aquel cuantioso informe, pues ya superaba las 12 hojas.
Recapitulando. Yoongi trataba de al menos encontrar el nexo correcto para informar al directivo Kim Namjoom en Eslovaquia sobre lo que sucedia en la empresa, y aunque este también hablaba coreano no podia presentar a su personal un informe en un idioma ajeno al suyo. La tercera tasa de te empezaba a pasar factura, pero no debia demorarse mucho, tenia que lograrlo si o si.
El reloj marcaba las 3 de la madrugada, no muy tarde en realidad, al menos no para el. El frio continuaba golpeando su cuerpo y los pensamientos lo atormentaban constantemente. Su concentración era tanta que no pudo evitar derramar su te caliente en su pantalón cuando un fuerte estruendo ataco en medio de la noche. Un golpe seco, certero, Yoongi no era escéptico, pero definitivamente aquello lo había asustado.
Cual niño trato de ignorarlo, de verdad que lo intento, pero un leve gemido lo descolocó por completo y calo hasta sus huesos. Con cuidado y silencio arrastro su silla de oficina hacia atrás impulsandose con sus palidas manos sobre el escritorio, delicadamente, suavemente.
El lugar parecía vacio, todas las luces continuaban apagadas y ningún ruido volvió a escucharse.
- Oh.. e-esta bien, esta bien - intento calmarse - debe ser el sueño y el estrés.
Sin embargo un nuevo quejido volvió a escucharse a lo lejos. Yoongi tomo valor de sabra Dios donde y a pasos lentos comenzó a moverse por el lugar. El cubículo de Hoseok estaba vacío, Jungkook igual, Taehyung tambien.
Continuo a paso lento hasta que un cuerpo delgado cayo sentado sobre su pie izquierdo.- Ahhhhhhhhhhhh.
- Ahhhhhbhhh - Gritaron al unisono.
Una bonita cabellera rubia lo miraba desde arriba mientras se abrazaba a su pierna buscando proteccion.
- Diablos! Aléjate!!! - Respondio Yoongi poniendo una mano en su pecho mientras que con la otra arañaba al chico que invadía su espacio personal.
- No me pegue Hyung!!! - Exclamo haciendo un bonito puchero mientras hacia unos ojitos llorosos y culposos. - Me duele. - Yoongi guardo calma.
- Maldita sea niño - La voz de Yoongi continuaba entre cortada mientras que su respiracion no lograba recuperarse. Habia tenido un susto horripilante.