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La fiesta de compromiso ya había pasado. Las cosas seguían igual.
Bueno no todo, Gulf se encontraba en aquel maravilloso departamento.
Estaba empacando sus cosas, hoy sería el día en el que dejaría ese lugar que tan maravillosos momentos le había brindado a ambos, pero a la vez era testigo del sufrimiento de ellos.
----- Gulf, ya está empacado todo lo de abajo. Solo faltan las cosas de tu habitación y las cosas del baño ----- Dijo Kao.
----- Por esa cosas no te preocupes yo me encargo de empacarlas ----- Dijo Gulf.
----- Esta bien, en lo que terminas de empacar las cosas iré a comprar comida, ya regresó ----- Gulf asintió, y Kao se fue del lugar.
Gulf subió y quedó viendo aquel lugar, quería llevar grabada una imagen en su mente de la habitación que había compartido con el amor de su vida, a la cuál nunca más volvería.
Entró con una maleta para guardar su ropa y sus accesorios.
----- Empezó por sus pantalones, cuando los empezó a sacar cayó una cajita, la vio y las lagrimas comenzaron a brotar, la agarró, la abrió y pudo ver el collar de ancla ----- Creó que desde esa vez no nos dimos cuenta que no estábamos destinados a estar juntos, pero seguimos insistiendo hasta que tú te diste cuenta que yo no era la persona que tú amabas ----- La voz de Gulf tembló ----- Ojalá War nunca me hubiera dado esta cajita, si así hubiera pasado, yo no estaría en este estado, pero bueno, hay cosas que no podemos cambiar ----- Miraba tristemente el collar y dijo ----- Solo se que tú tampoco me perteneces, porque ya no soy el ancla que detiene a Mew. Por eso muy pronto estarás con tú verdadero dueño ----- Gulf guardó la cajita y comenzó a guardar todas sus pertenencias.
Kao llegó con la comida y Gulf bajo todas sus pertenencias. Se sentaron a comer y después de un rato llego el carro de la mudanza. Subieron las cajas al carro, mientras Gulf le dijo a Kao que fuera bajando que ya lo alcanzaría.
Gulf se quedó recorriendo por última vez el hermoso departamento que habían escogido juntos, al final pasó todo lo que él temía. Como dicen lo que mal empieza mal acaba y claramente el no era excepción.
A su memoria vinieron tantos bellos momentos que vivieron juntos. Pero habían dos muy especiales que jamás olvidaría. Recordó el primer día cuando se pasaron, Yin y War los ayudaron estaban tan felices los cuatro. Ese recuerdo siempre lo mantendría presente, también recordó la primera vez que lo hicieron en su nuevo departamento, habían salido a cenar estaban celebrando que ya habían cumplido 8 meses de estar juntos, Mew lo había llevado a uno de los restaurantes más caros, ahí pasaron una velada increíble, y para cerrar con broche de oro hicieron el amor en el sofá azul, lo hicieron parte de la noche que les quedaba y se quedaron dormidos, Gulf se había despertado antes que Mew y observó el amanecer por aquel gran ventanal. Era de sus momentos favoritos, estaba con la persona que ama y la vista era simplemente perfecta, se sentía el chico más afortunado, pero no todo duraba para siempre.