Narra chanyeol
Odio estar en un lugar lejano y mas no saber que ha pasado con nikki, por lo menos no estoy solo y tengo a suzy que es una gran amiga mía y de ella. Hace unos días le pedí el favor que averiguara todo sobre nikki, si logro escapar, si está bien, me desespera ser un poco ignorante.
Hola channie – su cara es seria – te tengo una mala noticia –
Que paso con niki –
Se marchó, se fue, no se sabe nada de ella y ni de su padre – dijo – eso me dijo mi madre –
Estas segura? –
Mi madre nunca me mentiría – afirmo –
No lose pero me parce extraño –
Es mejor que la olvides –
Me extraña eso de ti. Acaso no eres su amiga –
Si lo soy chanyeol y se por todo lo que le a pasado. Además por eso mismo eh guardado mis sentimientos por ti para que ella tuviera un futuro contigo –
A caso crees que tú lo tienes conmigo? –
Lo siento – dijo llorando mientras se marchaba. Me sentí miserable al verla asi pero sería un error engañarla. Ella sabe que yo quiero a nikki y que nunca la olvidare fácilmente –
A los pocos días me entere por unos amigos sobre la muerte del padre de nikki y la desaparición de ella. Quería regresarme inmediatamente pero no me lo permitieron. Luego me entere que ella desapareció y que lo más probable es que ya no me quiera ver. Esto último me lo dijo krystal que al parecer fue la última que la vio.
Todas estas cosas me tienen fuera de control, llevando mi sufrimiento al límite.
Deja de arrojar cosas – gritaba susy – crees que comportándote como un vil delincuente hará que tu madre te lleve de regreso –
Por lo menos lo intento – dije frustrado – déjame en paz – grito – lárgate suzy –
Eres un tonto. Deberías simplemente olvidar –
Narra nikki
Me encuentro encerrada en una correccional de menores. Irónico? Todo mi vida maltratada y atrapada entre golpes y abusos psicológicos y por ese mismo hombre solo soy la escoria de la sociedad. Todo sería diferente si por lo menos lo hubiese visto, a chanyeol. Me duele que se halle marchado. Por krystal me entere que ha preguntado por mi asi que mande la razón de que se olvide de mi, que me desaparecí, como algo como yo podría aspirar a un chico como el.
Aunque en realidad no mate a mi padre la carca de ser una asesina queda, no podía permitir que krystal pagara por eso, el se merecía la muerte y yo quiero ser responsable por ella. Por eso mismo me entregue. Por lo menos tener esa satisfacción, aquí tengo techo y un poco de comida, al igual que amistades que han pasado por cosas peores o iguales a mí.
Eh decidido olvidar todo, volverme fuerte, no tengo nada más que a mí misma. No sé en qué momento salga de aquí, solo soy una menor de edad que no tiene nada. Y de la nada surge la vida, asi como de las cenizas el fénix.
CAPITULO 24
Oye chica estas en mi lugar – me empuja –
Que te pasa – grite enojada, yo tenía mucha rabia en mi corazón no quería que me tocaran nuevamente, no quería que me lastimaran como lo hacía mi padre, y pienso no dejarme de nadie –
Vaya la mosquita muerta tiene agallas – se acerca con una navaja – escuche que asesinaste a tu padre – dice burlona – que fue…te tocaba? Te pegaba? O simplemente lo odiabas –
Eso a ti no te importa – ella sonríe y le hace una seña a alguien, una persona me agarra por la espalda y me toma el cabello –
Ahora si princesa enójate – dice la chica colocando la nava muy cerca de mi rostro –
De que te lamentas – dije – de que haya matado a mi padre o del que tu no tengas ninguno que matar, ya que al parecer simplemente te botaron –
Maldita zorra – me golpea en el vientre – sigues hablando de esa manera y tu carita quedara desfigurada –
Que pasa aquí? – escucho una voz masculina –
Eso no te importa Mark, ella es mi nuevo juguete – el se acerca y me inspecciona –
Es bonita –sonríe – quien te dijo que podías quedarte con lo que ya es mío –
Pero mark tu no puedes hacerme esto, además yo soy tuya no me vas a cambiar por esta asesina –
Quien dijo que tu eras indispensable – el chasquea los dedos – chicos vengan acá – varios chicos de mi edad se acercan y el que me sostenía me suelta – me gusta que aprendan quien manda aquí –
Esa me las pagaras zorrita, nadie me quita a mi hombre – dice furiosa – chicas vengan y tu también inepto – le dice al chico que me había agarrado –
El chico se me queda viendo y yo igual, estaba enojada por tener que depender de alguien nuevamente, simplemente me iba a retirar de ese lugar.
Ni el gracia me das – yo detengo mis pasos –
Gracias – le mire – contento –
Ni tanto – respondió – solo que ahora eres mi chica -
Tu chica? - me burle – no hay mejores que yo a tu alrededor, y por cierto yo ya tengo un chico –
Y se puede saber a dónde esta que no lo veo? –
No lo sé –
Entonces te dejo y tú solo sufres aquí – se burla – yo no te pido amor, solo se mi chica y tendrás mi protección –
Me largo – respondí y varios chicos se colocan en frente de mi –
Déjenla marchar – ordeno y me abrieron camino –
Los días de visita llegaron y con ello vino krystal a verme. Ya llevaba varios meses mi cabello había crecido y estaba más delgada que nunca, en este lugar tenía muchas enemigas pero al parecer ese chico mark se había vuelto mi caballero negro, yo solamente le rechazaba una y otra vez.
Hola – digo no muy animada –
Veo que el encierro no te lleva nada bien – yo sonrio – y ese chico todavía te acosa? –
Cual? –
El que parece vándalo –
Mark? – suspire – no se rinde, por cierto has podido saber algo de chanyeol –
Si, pero no es muy bueno lo que te tengo que decir – ella saco un sobre – este es la conversación impresa del chat – yo lo ley y no lo podía creer, hasta foto incluida me mando, mi corazón se rompió. Como pudo el engañarme así, yo soy una tonta por guardar su amor dentro de mí, pero el simplemente sonríe con suzy y la tiene de novia –
Asi que son novios? –
Al parecer nikki, tu amiga no era quien decía ser –
Yo necesito estar sola –
Nikki, espera – me detuvo – le quieres mandar algo a chanyeol – tenía razón, yo le escribí una carta – se la escribes al mail al pie de la letra –
Si –
Desde hoy Park chanyeol deja de existir para mí – camine hasta donde estaba mark –
A que se debe el placer de tu presencia –
Voy a ser tu chica – el solo sonrio y yo solo decidí olvidar todo rastro de amor puro –
