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lluvia

Las gotas golpeaban una tras otra sin cesar el cuerpo temblante de aquella chica de delgada complexión, con una insípida mirada fría a aquel ataúd que albergaba el cuerpo de lo que fue el tercer hokague, se encontraba de nuevo perdida en su propia cabeza, divagando en recuerdos que ni ella misma parecía conocer, tratando de escapar de los recientes sucesos que acechaban fuertemente, queriendo repetirse en bucle, aquel grito,  aquella sangre y sobre todo aquel abrazo

Ese grito que hizo su corazón dejar de latir por un segundo, el llamar de aquel precioso apodo que tanto le gustaba escuchar, proveniente de la que es probablemente la persona que mas quería, el que ahora se habia convertido en lo mas cercano a su figura paterna, el hombre al cual admiraría incluso después de que usase la ultima de sus respiraciones, sabiendo con amargura el inmenso dolor que podría causarle a su preciado compañero de cabellera blanca, el cual ahora sostenía su hombro con algo de firmeza brindándole todo el apoyo en tan solo una pequeña acción, quien ella consideraba un ser tan puro quien era la ultima de las personas en merecer tan horribles perdidas y dolores 

Recordaba aquel chispazo de adrenalina por el cual seguramente ahora estaba parada recapitulando sucesos que para ella seria mejor olvidar, pero de nueva cuenta su mente estaba en su contra, como si fuera aquel mismísimo momento, sintió aquella cuchilla cortar la piel de su cuello, su propia sangre correr por sus clavículas, casi sin poder creer que aun ese estado pudo acabar con la vida del hombre que amenazaba la suya, vaya quien a saber el por que tal esmero en acabar tan específicamente con su vida, con sus primeros rayos de lucidez empezó a teorizar pues el hecho de que fuera Orochimaru el autor de tal caos en toda la aldea no hacia que la idea de que se relacionara con Shisui fuera descabellada y sin fundamentos 

Y como si no fueran suficientes los sucesos inolvidables recordó aquel abrazo, quizá sentía que exageraba en incluir aquel abrazo en su cubeta de grandes sucesos, pero sus mejillas calientes y su corazón acelerado la obligaban a hacerlo, para Lazari esta es la primera vez en que sentía las dichas mariposas revolotear en su estomago con solo un recuerdo y no hacia mas que preguntarse si aquello habia sido un acto amistoso o algo que ella desea sea mas 

Aun que ella no lo notara el chico de blancos ojos le dedicaba su atención a los detalles de sus acciones, observaba como otra vez ella estaba divagando y ahora el se cuestionaba interiormente si le hubiese dedicado algún efímero pensamiento. Observaba como sostenía una rosa blanca en sus dedos pálidos, como el esmalte negro que siempre se ponía estaba ya desgastado y como los pétalos blancos se estaban manchando con sangre que provenía de aquel delgado dedo, pues ella estaba clavando una de las espinas casi sin  darse cuenta ''esta abrumada'' pensó casi como si estuviera dentro de su cabeza; De la nada su cabeza se giro bruscamente en dirección al chico de ojos perlas, viéndose a los ojos, como queriéndole decir mucho sin decir nada, noto como en las vendas que portaba en su cuello brotaban manchas rojas gracias al brusco movimiento y la chica no pudo evitar llevar su mano al cuello de nuevo

el chico avanzo hasta donde, ella sin despegar nunca sus miradas, se paro junto a ella y entrelazo sus dedos meñiques, actuando sin pensar otra vez, pareciera que era un acto insignificante pero para aquellos dos chicos lo significaba todo, para Neji esta era la segunda vez que se dejaba llevar por sus impulsos y para el no era del todo bueno. Para ella, no era mas que una sorpresa tras otra, sorpresas que hacían volcar su corazón y sentir un mar de emociones sobre ella en cuestión de instantes.


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⏰ Última actualización: Jun 04, 2022 ⏰

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Kare No Egao -Neji Hyuga-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora