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Izuna y Tobirama ya estaban en contacto por medio de la llamada, iniciada por un dudoso pelinegro, ninguno dijo nada por unos segundos.

T - › pero estamos tan enamorados, es una locura


Esas palabras fueron lo que Izuna escuchó de parte de la otra persona, Tobirama. Todo había quedado en silencio nuevamente, durando pocos segundos, ambos soltaron la misma oración.


T; I- › no puedo tener lo que quiero, pero tú tampoco

. . .

Encontrado en casa del Senju menor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora