Deseos incesantes

Desde ese instante

Las chicas ya habían llegado a casa de Sara, cuando ella se disponía a abrir la puerta se dio cuenta de que se había olvidado sus llaves en el casillero de la universidad, entonces decidió llamar a su padre para saber si vendría pronto a casa y así fue Sara le pidió a Alexandra que esperaran unos minutos que su padre no tardaba en llegar a casa para poder entrar. Luego de un tiempo Alexandra veía como se acercaba un auto lujoso color azul, no se podía divisar a la persona que lo conducía porque los vidrios eran de color negro. Finalmente se parqueó y de ese auto salió un hombre muy apuesto de tez blanca, cabello negro, profundos ojos verdes y muy alto, desde ese instante Alexandra supo que algo en su interior se removió, enseguida Sara corrió a abrazar a su padre y le dio un beso en la mejilla, él mirándola con ternura toco su cabeza y la saludo con una deslumbrante sonrisa. Mientras Alexandra esperaba que termínense de saludarse, Sara tomo de la mano a su papá y le presento a Alexandra, le dijo que ella era una amiga de la universidad y que harían un trabajo juntas, ella no podía ni mirarlo a la cara, enseguida él se presentó, yo soy el padre de Sara, el señor Connor, y extendiendo su mano tomó la de Alexandra, ella estaba verdaderamente avergonzada, por alguna razón tenía un raro sentimiento que parecía hacerse más fuerte a cada segundo. Pero para la suerte de Alexandra, su amiga no había notado su raro comportamiento.

Luego el padre de Sara le dijo a su hija que en un momento les subiría algo para cenar, entonces ellas se dirigieron al cuarto para empezar a organizar su trabajo, mientras Sara hablaba sin parar como usualmente lo hacía, Alexandra no podía dejar de pensar en aquel primer encuentro con el señor Connor, ella no sabía lo que le sucedía, pero algo le decía que eso estaba mal, entonces no pudo más y decidió salir corriendo, le dijo a Sara que la disculpara, pero que tenía que irse en ese mismo instante, Sara sorprendida por su actitud decidió seguirla, Alexandra al bajar las escaleras de forma tan acelerada no se dio cuenta de que el señor Connor traía un refrigerio y chocó con él, mientras las cosas se esparcían por el aire debido al impacto, el padre de Sara cayó al piso y Alexandra cayó encima de él, luego de unos instantes ella reaccionó y se dio cuenta de la situación, sus miradas se encontraron y permanecieron fijas por unos segundos, entonces su cara se tornó totalmente rojiza, de prisa ella se levantó, pidió disculpas y se fue. Cuando Sara llego vio a su padre en el suelo y le preguntó acerca de lo que había sucedió, pero él solo sonrió y le pidió que lo ayudara a levantarse. Sara estaba un poco confundida, pero entendía que tal vez para Alexandra no era fácil adaptarse a socializar con personas nuevas. Esa misma noche Alexandra llego a su casa muy inquieta, como los padres de ella no pasaban en casa, no tenía a nadie a quien poder contarle lo que le sucedía, así que subió a su cuarto, se dio una ducha y luego se recostó en su cama, quería tratar de olvidar lo que pasó en casa de su amiga, pero los recuerdos de aquel momento en que sus ojos vieron al señor Connor se negaban a salir de su mente.