❝𝑩𝑨𝑰𝑳𝑬𝑴𝑶𝑺 𝑨𝑳 𝑹𝑰𝑻𝑴𝑶 𝑫𝑬𝑳 𝑷𝑬𝑳𝑰𝑮𝑹𝑶❞ || [𝑅𝑈𝑆𝑃𝐸𝑅]

♤CAPÍTULO OCHO♤

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La infantil canción de cumpleaños se empezo a oír en su cuarto, abrió sus ojos incorporandose en la cama viendo a su padre con un cupcake con una velita en forma de 18

-Feliz cumpleaños mi princesa bella- España dejo el pastelito en las manos peruanos-sopla las velas y pide un deseo

Perú río, tomo aire y soplo la vela, sabía el esfuerzo que hacía su padre para celebrarle su cumpleaños pues no solo era su cumpleaños

Su madre murío el mismo día que nació ella...

Agradecía que su padre no la odiara, es más, cada cumpleaños lo hacía a lo grande y ese año no era la excepción, su fiesta iba a ser igual de grandiosa que las anteriores

Después de soplar la vela y que su padre le diera un abrazo, fueron a desayunar, mentiría si no dijera que Perú termino empachada por todo lo que había comido

-Ya no puedo-la chica se dejo caer en el mueble bajo la mirada divertida de su padre

-Bueno mi princesa hermosa, el ruso dijo que te esperaba en el techo de siempre así que yo de ti me apuro- como si fueran palabras mágicas, Perú fue corriendo a su cuarto buscando que ponerse, tavez no le importara su ropa si Argentina o Ecuador venían pero era Rusia, su novio y el único día que lo dejaría que la viera en piyama sería el día después de su boda...eso ni ella se lo creía, probablemente si se quedara a dormir en el departamento del ruso

Mientras tanto, España ordenaba a sus sirvientes que empiecen con los preparativos para la fiesta, conociendo a su hija no bajaría por las escaleras como una persona normal si no saldría por la ventana arriesgando su vida, si, talvez debería ponerle un pare a su hija, pero era tan difícil decirle que no por la carita de llama regañada que ponía, había sido mala idea haberla dejado en su niñez a cargo de Francia, la europea sabía como manipular y había transferido sus conocimientos a su amada hija

Un globo romperse lo hizo saltar, volteo mirando mal a una chica quien se disculpo por eso, había inflado de más el globo

Volviendo con Perú, la chica ya estaba vestida, un polo blanco de estampado de gatos, una falda azul, zapatillas blancas, medias azules y su largo cabello iba amarrado por dos trenzas adornadas de flores. Fue a su cómoda echandose un poco de perfumen, agarro unos lentes de sol en forma de corazón regalados por su amigo estadounidense y su sombrero que la cubriría del sol. Ya lista, salío por la ventana subiendo a su techo y yendo de techo en techo hasta llegar al techo donde estaba el ruso

Al llegar lo vió sentado jugando con una pistola, río por lo bajo acercandose con cuidado sin hacer mucho ruido, iba a asustarlo pero el albino se le adelanto, sin esperarlo, el albino se levanto y la cargo por la cintura recibiendo ella el susto

-Feliz cumpleaños mi bella palomita- la peruana iba a reclamar pero fue callada por un beso del albino haciendo que el enojo pase

-Gracias mi osito-lo abrazo con cariño acurrucandose en el hombro contrario

Una escena adorable pero la peruana tenía algo que hacer. Con mucha pena se separo del ruso haciendo que este la baje con una sonrisa

-Me acompañarías a ver a mi madre?- eso sorprendió al ruso pero accedió, sabía lo importante que era eso para ella

-Claro, yo iría contigo hasta el final del mundo-eso hizo reír a la peruana, se puso de puntitas besando la mejilla del contrario