Cuando aquel hombre murió 2 dioses proclamaron su espíritu, el uno, alegando que había nacido en tierra de su adoración, con sus ambos padres creyentes en él; el otro, justificando que su voluntad y creencia personal lo hizo acreedor a su reino. Como no lograban llegar a un acuerdo llamaron al individuo, le ofrecieron un sinfín de experiencias y regalos para su nueva vida. El hombre aunque estaba más inclinado por uno, el otro era el dios al que dedicó sus horas de adoración por voluntad propia, y no quería decepcionarlo; sim embargo, desde una mayor perspectiva, su vida la dedicó a él porque pensaba que era el único legítimo, mas al no ser así, se fue con el dios de sus padres.
La deidad no elegida quedó muy decepcionada, nadie le perpetró antes una grosería de tal magnitud, dejó de conceder milagros, la gente poco a poco dejó de creer en él. Terminó por abandonar la vocación. Emigró a una montaña alta, donde se sacrificó hacia uno de los dioses para que este se ensalzara como el de supremo poder entre los restantes, y la gente al ver el alcance de este renovado dios dejara de pelear por ellos.
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Dioses muertes y otras formas de vida
Spiritual¿Qué rol ocupamos en el mundo?, en uno plagado de religiones y situaciones de toda índole que nos arrebatan de la existencia... ¿Por qué molestarnos en caminar entre dioses y esqueletos encapuchados con un marcado objetivo?, somos nada en comparació...