La noche había caído tan rápido que hasta daba angustia asomarse por la ventana y ver la oscuridad en el cielo. Heeseung estaba intentando dejar de lado sus pensamientos y concentrarse en lo que hacía, lo cual era, apurarse en cerrar esa maldita tienda en donde trabajaba. ¿Qué más daba? Cuando era el único en su pandilla quien tenía la decencia de estar en un negocio "decente" debía correr con este tipo de cosas... Horario excesivo y de paso extra para poder tener dinero suficiente para sus necesidades y para esconderlo de sus amigos que se aprovechaban de su debilidad.Heeseung odiaba que siempre quisieran que les resolviera la vida a esos idiotas, ¿Se creían lo más importante del barrio porque tenían droga en el bolsillo? Por favor, Heeseung no daría ni un centavo para que consiguieran esas cosas, estaba en esa pandilla por la compañía, no por lo que hacían. Pero en algún momento todo llegaba a cansar.
De un fuerte jalón logró cerrar la santa maría, poniendo el candado para mejor seguridad, según su jefe, mientras refunfuñaba por lo bajo e intentaba recordar si había puesto la alarma. Con fastidio, miró la hora en su celular y se percató que ya eran más de las mueve de la noche, no podía creer que el día se haya ido tan rápidamente.
Pobre de él, pensaban los que le veían pasar por las calles a esas horas. Tenía el rostro cansado, su delgada y alta figura se notaba hastiada de vivir en el mismo hueco durante todos los días de su corta vida. Nadie se merecía eso pero, no podía culparse, ¿Por qué lo haría? De todos modos estaba... Vivo y eso era lo más importante. Caminaba con paso cansado porque lo que deseaba era ir, acostarse en su cama y dormir si es que sus amigos le dejaban llegar sin preguntar un millón de cosas absurdas.
Era así, monótono, cansado y fastidioso. Pero no podía pedir más, si reunía el dinero suficiente podría largarse de esa casa y de ese barrio sin decirle nada a nadie, podría ir a la parte linda de la ciudad y comenzar una vida mejor... Podría incluso estudiar en la universidad y servirle a la sociedad aunque sea con una simple hoja de papel, de todos modos eso era mejor a soportar a un grupo de ineptos todos los días, hasta prefería el trabajo de cajero.
Pero a veces, pensaba que todo podía ser mejor, que podía salir adelante y conseguir todo lo que en algún momento pensó podría hacer. Heeseung podía ser un chico de veintidós años pero a veces tenía mente de bebé y solamente quería hacer como que todo era una pesadilla.
Suspiró, pateando una piedra y metiendo las manos en los bolsillos de su chaqueta, empuñando con fuerza su navaja por precaución, no era la primera vez que usaba una de esas para defenderse. Hacía un frío terrible, estaba seguro que las puntas de sus dedos estaban volviéndose moradas ante la baja temperatura, sus pies pisaban la acera y el bullicio de los carros en la avenida lograba aturdirle, incluso el olor a cigarrillo y las voces que oía a lo lejos le hacían sentirse raro.
Su barrio estaba un tanto lejos de su lugar de trabajo, esos minutos de caminata los usaba para pensar y pensar, sin llegar a nada en concreto, simplemente repitiéndolo todo en su mente y llegando a la conclusión de que su vida era patética estando ahí. ¿Qué dirían sus padres? Seguramente estarían decepcionados, de todos modos, nunca podría saberlo.
Sus ojos oscuros dejaban notar lo harto que estaba de seguir el mismo curso todo el tiempo, la seriedad en su rostro haciendo que nadie quisiera mirarle directamente, su voz fría tanto como el vapor blanco que dejaban salir sus suspiros. Heeseung en algún momento de su vida tuvo felicidad en sus labios, debía llegar algo lo suficientemente bueno para sacarle una risa, una que fuese genuina y no como las que se había acostumbrado a soltar. Llenas de burla o simplemente, siendo bufidos sosos.
Era una persona realmente aburrida... Pero aún así, todos en el barrio sabían que tenía a alguien, al pendiente de todo lo que hacía. Tenía un admirador no tan secreto, por decirlo así, un acosador en todo el sentido de la palabra, tal vez; a Heeseung no le interesaba mucho que digamos.
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⌗ PSYCHO ‹
Mystery / ThrillerSe creía que por cargar ese bate en sus manos delicadas y magulladas, podría causarle algún terror. Ese chico buscaba llegar muy lejos, pero lo que no sabía era que Heeseung tenía un truco bajo la manga. ¿Y qué si ese lunático llegaba a su casa y a...