- ¿Quien es el?- dije mirando a un chico que se me hacía extrañamente familiar.
- Oh, es Edward Cullen, es lindo ¿no?- dijeron las chicas que se encargaron de recibirme en esta escuela.
-No puede ser- dije en un susurro casi inaudible- Cedric...- mi...
Ok, esto es extraño, me encuentro en la oficina de Dumbledore junto con McGonagall, el tipo raro de Durmstrang, el ministro de magia, Ron, Hermione, la hermana de Fleur y obvio Dumbledore, no entendía nada.
Después de la cena McGonagall me llamó para que viniera y pues eso hice, al principio me asuste porque creí que se trataba de otra cosa, pero cuando vi a los demas mi alma volvio a mi cuerpo... por el momento.
pero bueno.. ¿Qué hacíamos todos aquí? vaya a saber Merlín.
Estábamos los cuatro en un silencio algo incomodo mientras los adultos hablaban, hasta que Hermione decidió romper el horrible silencio.
— Disculpe profesora, ¿podría preguntar porque nos llamo aquí?—
— Oh si claro señorita Granger, el profesor Dumbledore les explicará en un momento. —
— Lamentó haberlos hecho esperar tanto, me alegra mucho tenerlos aquí esta noche, se que se estarán preguntando para que los llame, y eso les diré justo ahora — Se aclara la garganta —Ustedes son lo que más valoran nuestros cuatro campeones y si pudieron descifrar el misterio sabrán que tendrán una hora para encontrarlos bajo el agua.- estaba literalmente en shock.
- Pero profesor, ¿Cómo se supone que aguantemos tanto tiempo debajo del agua?- pregunta Ron.
- Muy buena pregunta señor Wesley, de eso nos encargaremos nosotros, ahora quiero que tomen chocolate caliente, hace un poco de frío- Eso hacemos, nos entregan a cada uno una taza de chocolate caliente y la comenzamos a beber, cuando de repente empiezo a sentir los ojos pesados- Dulces sueños- Eso es lo último que escucho antes de quedarme profundamente dormida.
Narrador omnisciente:
(aclaración, esta historia no iba a tener narrador omnisciente en la parte de Hogwarts pues solo es la perspectiva de la protagonista, esta narración comenzaría después porque esto es solo lo que vive ella, pero como estará bajo el agua es necesaria esta narración para darle un poco más de sentido a la historia, sin más que decir, continuemos)
Era el día de la segunda prueba y un muchacho se encontraba muy nervioso buscando a su novia, ¿Dónde estará? Se preguntaba el, no podía creer que en un día tan importante para el, ella hubiese decidido no aparecerse.
La busco en las mazmorras, en el gran comedor, en la biblioteca, en el patio de atrás, el de adelante, los pasillos que ella frecuentaba, preguntó a sus amigos y nada.
- No te preocupes Ced, a lo mejor ya está en el lago, no se perdería esto por nada- Kira le dio una sonrisa para tratar de tranquilizarlo, pero la verdad era que no había visto a su amiga hacía horas, no desde que McGonagall se la llevó para hablar.
El sin más se rindió, y se resignó a irse a cambiar para la segunda prueba, aún se sentía algo preocupado por T/n y tenía la esperanza de verla en el lugar donde se realizaría la prueba, pero su decepción aumentó aún más cuando no la vio ahí, hizo el intento de olvidar el tema pues tenía que concentrarse en ganar. Cho aprovechando la ausencia de la chica se abalanzo en los brazos de Cedric haciendo que este la apartara rapidamente.
- ¿Qué crees que haces?-
- Solo vine a desearte suerte, ya que al parecer tu noviecita ni si quiera se digno a venir- Cho sonríe sarcástica, Cedric sintió una punzada en su pecho, ella tenia razón-
- Pues ella habrá tenido sus motivos- el se dio la vuelta posicionándose donde tenia que hacer la prueba, dejando a la chica con la palabra en la boca.
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