Desnudo vi tu cuerpo; cada pequeña parte de él. Sentí como tu piel se pegaba a la mía, tu respiración se sentía rápida e intensa.
Era un momento perfecto, una situación irrepetible. Te besaba y acariciaba tus labios con mi lengua, no existía momento alguno en el que haya dejado de amarte.
Tu aroma, tu aliento cálido y sumiso ante mi, puedo sentir tu piel, tus miedos, tu alma.
No puedo dejar de mirarte, tan hermoso con eso a lo que le llamas defectos e inseguridades, pero ante mis ojos eres arte.
Fuimos uno siendo dos.
Escribimos nuestra historia cada vez que hacemos el amor, con altas y bajas hemos escrito nuestra historia en la piel y en el alma.
A&G Writer
