Me coloco los audífonos mientras busco en mi celular They Don't Know About Us de One Direction.
Coloco la música, sumergiéndome en la letra.
Es mi banda favorita, en secreto. Nadie sabe que llore en mi habitación cuando se separaron. Sin duda el peor de mis días, pero aun así, estoy feliz de que aun estén sus canciones.
También me gusta Big Time Rush.
Pero oculto esos hechos, me avergüenza un poco, además las chicas con la que solía salir, tenían un pésimo gusto musical.
—No quieren llamar la atención eh... ¿Pero como no lo harán si vamos en el auto de Rayan?
—Cállate y disfruta, será la primera y ultima vez que subas aquí—le dije a Kenny.
—Ni que fuera la gran cosa.
—Más que tu miseria andante, si.
Iván y Julián rieron.
—Es verdad hermano, deberías jubilar al pobre.—Mi hermano se burlo, pero estaba en lo cierto.
—Marcela funciona muy bien—defendió Kenny.
—Tan bien que la otra vez quedamos en medio de la carretera y sin una llanta.—Solto Iván, haciendo que estalláramos en carcajadas.
—¡Hijo de mierda! Prometiste que no le dirías a nadie Iván.
—No seas egoístas, debemos compartir nuestros secretos Kenny.—le dio una palmada en la espalda—Que no te avergüence.
Julián y yo seguimos riendo. Kenny harta un poco, pero es un buen sujeto y amigo. Es de las persona más humilde que conozco.
Seguí conduciendo, guiándome del mapa. Noah menciono que llegaría un poco tarde, porque tuvo un imprevisto...
Me pregunto cual será.
El restaurante no estaba muy lejos de mi casa, por lo que no tardamos en llegar. Es un lugar lindo, y se ve algo costoso.
Esta ubicado en la calle principal, por lo que le di la llave a unos de los porteros, para que se encargara de mi auto.
—¿Tienen reserva?—pregunto la chica de la entrada.
—Oh, no... Pero un amigo de nosotros nos cito aquí, así que supongo que el reservo...—respondí.
—Y... ¿Cómo se llama ese amigo?—volvió a peguntar ella, pero esta vez con una mueca, de disgusto, mirando sobre mi hombro.
Con curiosidad me gire, y por desgracia capte al idiota de Kenny guiñándole el ojo a la chica, de una forma asquerosa.
Iván la empujo, moviendo sus manos en forma de, ¿Qué te sucede? Controla esas hormonas.
—Se llama Noah.
—Oh, el joven Noah Flet... Pasen, disculpen, es por aquí—ella lucio apenada, guiándonos por el interior del restaurante.
Si por fuera lucia impresionante, por dentro aun más.
La mayoría de las personas en este lugar parecen importantes, de la alta sociedad. Me pregunto que poder tiene el nombre de Noah para poner nerviosa a la chica con solo menciónalo
Ella nos guía hasta llegar a una mesa amplia, y de las que lucen mejor.
No dudo en sentarme en la una de las sillas, tomando de inmediato el menú.
—Aquí están las tabletas, pueden pedir lo que gusten, he ordenarlo desde allí.—dijo extendiéndonos unas tables.
—Vaya... Un restaurante con tecnología avanzada, me gusta—comento Iván tomándolas.
ESTÁS LEYENDO
Mi último amor de verdad
RomanceRayan Cox un atractivo jugador de hockey, quien gracias a esa gran virtud lograba sus objetivos planteado con cualquier chica. Nunca daba o demostraba más que eso. Pero el mundo dio un giro inesperado. En el que conoció a Scarlett Brown , la chica...