Dulce de calabaza

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Se podía ver un humo negro saliendo del horno, rápidamente Draco tomo un trapo que estaba en la barra de la cocina y lo tomo para poder sacar el contenido sin quemarse, olvidándose en todo momento que podía usar su varita. Con rapidez sacó un molde redondo con un pastel quemado, al verlo maldijo por debajo y aventó todo hacia la barra donde tenía otros dos intentos de tarta.

Quería sorprender a Harry, era su cumpleaños y deseaba hacerle algo especial por el mismo, no solo comprar algo y dárselo. Apenas era su segundo año viviendo juntos y los cumpleaños pasados salían a comer a donde su novio quisiera para después reunirse con sus amigos y beber un poco. Esta vez sería diferente, cenarían en casa solo ellos dos con la comida que tanto le gustaba a su Harry para después ver las películas Muggles que sorpresivamente le terminaron gustando a él también. En su maratón, Draco lo sorprendería llevándole su pastel favorito de melaza  hecho por sus propias manos con una vela encendida, le cantaría feliz cumpleaños para finalizar con el soplando la vela y comer el postre sobre el sofá acurrucados junto con Salem Pelusa, su gato. Ninguno pudo decidir el nombre del gato, así que optaron por llamarlo de las dos formas.

Pero ahora todo se había arruinado, porque Draco no sabía cómo hacer una simple tarta, estaba frustrado, llevaba toda la tarde intentándolo y se le acababa el tiempo. Miro hacia la imagen de referencia donde tenía la receta de la tarta y después miró sus resultados, quería llorar.

-Esto es un asco, no puedo darle esto a Harry, es su cumpleaños, ¿qué crees que deba hacer Salem?

El gato maulló en respuesta mientras se estiraba para acomodarse sobre la barra y volver a dormir. Draco se golpeó mentalmente por estarle hablando al gato en vez de buscar una solución. Tamborileo sus dedos sobre el frío mármol de la mesa mientras pensaba que podía hacer para solucionar esto, se negaba ir a una tienda y comprar su pastel de cumpleaños, el quería hacerlo, se lo había propuesto, era un Malfoy, un exitoso porcionista, creía que al saber hacer pociones podría seguir una receta de cocina.

Estaba a punto de entrar en una crisis cuando recordó algo, busco su celular en el bolsillo de su pantalón que traía y lo saco para buscar un contacto, le daba gracias a Harry que le ayudó a adaptarse con la tecnología, era más sencillo que enviar cartas. Cuando encontró el nombre de la persona que buscaba presionó el botón de marcar. Espero dos timbres hasta que al tercero le respondieron.

-¿Si? - dijeron al otro lado de la línea.

-Necesito tu ayuda - hablo desesperado Draco mientras abría la ventana para que el resto de humo se saliera de su cocina.

-Ahora no puedo, estoy a punto de ganar una apuesta.

-Es de vida o muerte - se escuchó un silencio que duró una eternidad para Draco - por favor.

-Debes estar demasiado desesperado para pedirme las cosas por favor - Draco bufo por el comentario - esta bien, llego en diez minutos

Y colgaron. Draco se fue hacia su sala para acomodar las cosas que ya tenía preparada para Harry, después de hacerlo por milésima vez tomó asiento en el sofá a esperar, Salem llegó hasta donde estaba para subirse sobre su regazo y ser acariciado por su dueño.

-Descuida Salem, la ayuda está en camino - el gato empezó a ronronear con la mano de Draco acariciando su pelaje.

-o-

-En mi defensa, creí que funcionaria.

-¿Creías?, está peor de los que hice yo -le señalo Draco a Pansy el molde dentro del horno con la mezcla desparramada por todos lados.

Con su varita, Draco limpio el contenido y se llevó una mano al cabello con frustración. Llamó a Pansy para que le ayudara con la tarta porque creyó que ella podría hacerlo, tenía esperanzas en ella.

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