Prologo

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Malania, Sudeste de la Capital de Laros, último derrumbe de la semana.
Caída de tres edificios en el distrito exterior, causa: 596-X, "Adrian".

Era un día nublado de otoño, fácil de recordar por la magnitud de los hechos.
El espeso polvo de los escombros caídos por el derrumbe de los edificios, que cubría toda la zona, pintaba una escena atroz.

De entre el polvo y los escombros surgía una ligera figura.
Cabello oscuro, ojos rojos tristes y apagados, postura encorvada y fija. Nada más que un anillo en su palma, el cual presionaba con fuerza.

La figura salió a un claro despejado dándose a descubrir aquel joven rostro.

Adrián: Tú... -Apretaba con odio y fuerza su mano derecha frente a su rostro- ...Fuiste tú quien me hizo así, por que lo hiciste?

La mano del joven se abrió, mostrando una palma colorada por un color violáceo y cubierta de marcas por las uñas de esta. Y, justo en su centro, un hermoso anillo de oro.

Tal vez ya eras así, sólo no lo habías visto.. -Decía el primer dios menor. mientras era agarrado por el joven-

¿Cómo podría ser así sin saberlo? Alguien no arrasaría ciudades sin motivo alguno... no? -Intentaba rebatir la segunda Diosa menor.-

La tercera Diosa menor no hablaba pero su presencia era notable, como si fuera una sombra de las otras dos mientras que el cuarto no interactuaba lo más mínimo.

El chico se dispondría a pensar demasiadas cosas, estaba alterado, no le agradaba la presencia de los dioses ni mucho menos que le hablaran de esa manera, empezaba a perder el control lentamente y su cabeza se hundía en pensamientos oscuros a lo cual el primer dios intentaría acercarse para comprobar si este se encontraba bien poniendo una mano en su hombro a lo cual este respondería con agresividad casi instantánea diciendo, "no me toques con tus sucias manos" sacaría la mano de su hombro retrocediendo en la dirección donde se ubicaba, marcando frialdad y ira en su mirada, luego de un movimiento veloz este le arranco la cabeza al primer dios menor

El cuarto dios usando sombras y oscuridad lo ataría de piernas y brazos para impedir su movimiento, mientras que el otro creaba una capsula evitando que se libere, la tercera simplemente miraba a Adrián para entrar en su mente y intentar tranquilizarlo.

Chico relájate, te estas pasando de la raya y nos obligarás a ejecutarte si sigues así -El cuarto dios el cual usaba cadenas espirituales poco a poco desistía, sin duda el poder del sujeto estaba superando al de este-

Mientras que la segunda creaba más capsulas y escudos alrededor de este, si se llegaba a liberar de las cadenas con las cuales pareciese luchar por liberarse, podrían tener un final bastante similar al de su amigo el cual yacía en el suelo sin cabeza, la tercera buscaba algo para al menos darles tiempo pero fue en vano, sería rechazada de la mente del chico y saldría expulsada algo mareada, los pensamientos y recuerdos por poco la consumieron, decidió abrir un portal e irse en búsqueda de ayuda para sus compañeros, era bastante peligroso para los tres el enfrentarle a pesar de su poder, la diferencia era bastante evidente.

Bien, solo resistamos -Diría la segunda para potenciar sus escudos y mejorarlos esperando que al menos pudieran aguantar algo sin saber lo que les deparaba el destino-

Cuando la tercera llegaba junto a otra persona, era demasiado tarde, Adrián ya había acabado con los otros dos dioses, no pasaría mucho tiempo hasta que se apareciera, manchado con sangre y completamente ido en su mundo, con la ropa algo desgastada notaría la presencia de ambos seres a los cuales atacaría sin pensarlo mucho ni dar tiempo para poder reaccionar.

La persona denominada como Rain le daría un golpe simple en la nuca después de esquivar, dejándolo inconsciente de manera parcial tranquilizándolo por unos minutos, mirando los ojos de este intentando entender el porque de su actuar.

El chico despertaría bastante alterado aunque debido a lo que estaba haciendo sin embargo estaba aparentemente paralizado por el golpe, quería atacar pero no era capaz, limitándose a ver a aquella persona que también le veía inspeccionándole, gruñendo leve frustrado.  Adrián: Porque no has acabado conmigo? -decía casi sin ánimos pero a la vez al máximo, su tono de voz era alto, no solía andarse con rodeos-.

-Rain por su parte daba un leve suspiro y empezaba a caminar arrastrándolo, como si se burlara de el-.  Rain:Tengo un par de ideas para ti chico, solo asegúrate de no gritar mucho por el camino -se reía para irse volando a gran velocidad hacia lo que parecía ser su templo.-

Solo se escucharía un grito del chico alejándose, mientras que la diosa limpiaba el lugar arreglándolo y quitando escombros, dedicándose a cuidar de los cuerpos de sus compañeros fallecidos, lamentándose aunque tiempo después llegarían agentes para reanimarlos con una maquina de la cual se desconoce.

Realizando conclusión. . .      Kira: Último registro de la ubicación oficial del sujeto 596-X y destrucción causada por este, actualmente el peligro que representa no es seguro por lo que es necesario neutralizarlo o encerrarlo para su estudio y análisis, preferiblemente con un mínimo de contacto con el mundo exterior, sería demasiado arriesgado el permitirle aquello.

Asignando agente. . . . .asignación completada, agente 92-K enviado para proceder a su captura y seguido ejecución o la orden que sea requerida mediante el consejo superior.

EL BORDE DEL UNIVERSODonde viven las historias. Descúbrelo ahora