Encontrándonos de nuevo | unOrdinary

Prólogo

-New Bostin, Jueves, 7:45 p.m.-

Pov. William.

Pensar que todo puede cambiar, el mundo cambia, las personas lo hacen también, el amor cambia, todos cambian y nadie puede detener ese proceso en la vida.

Lo malo de todo es que yo notaba estos cambios, pero me hacía de la vista gorda, solamente quería creer que mi vida, a pesar de haber sido una mierda, ahora podía ser diferente con la familia que había formado.

Creo que solo era cuestión de que esto que forme, llegará a su fin.

— Mmm— escuche como alguien carraspeo solo para mirar a un lado mío.

Era la mujer más hermosa que conocí nunca, decir eso era poco comparado con su enorme poder, pero sabía que algo perturbaba su mente al igual que su corazón.

— ¿Sucede algo, Jane?— decidí iniciar una plática con una mala sensación de lo que pronto se avecinaría.

Ella ni siquiera volteo a verme, mantuvo clavada su mirada en nuestros dos hijos de apenas 8 años de edad jugando en los juegos del parque.

— Simplemente me parece inusual esto. Jania tiene un poder que se asemeja al mío... pero John, no he visto nada en él— mostró clara molestia en sus palabras cuando llegó a la pequeña incapacidad de nuestro hijo.

— B-bueno, tal vez necesite un poco más de tiempo...

— ¡Tuvo suficiente tiempo, William!— gritó Jane viéndome con una mirada diferente, no era la misma— ¡Ya era hora de que su habilidad se manifestara ante nosotros, pero no ha mostrado señales!

A pesar de los gritos, los niños se mantuvieron muy concentrados en su mundo sin percatarse del infierno que se aproximaba.

— Ey, mantén la calma, esto tiene un proceso— trate de no perder el control.

— ¡¿Y cómo lo sabes?! ¡Jamás tuviste una habilidad! ¡¿Cómo siquiera lo sabrías?!— aquellas cosas que dijo me hicieron pensar varias cosas, una de ellas era saber si realmente era Jane la que estaba hablando.

Hablaba tan igual a...

— ¡¿Desde cuándo siquiera te importa eso?!— estaba asombrado.

Ella solo lo pensó unos segundos, parecía que se cuestionó en un inicio sus acciones, ya que su mirada parecía afligida, pero luego se afilo para verme directo a mis ojos.

— Me he dado cuenta de ciertas cosas, Will. Una de esas es que lo nuestro nunca debió pasar— quedé estupefacto ante su declaración—, lo otro es que personas como mi hija y yo, no debemos relacionarnos con gente como ustedes.

Cada cosa que decía no era propio de ella, no la entendía, sabía que algo no andaba bien, pero jamás pensé que fuera a llegar a este extremo.

— ¿Entonces es así como quieres que las cosas terminen?— la mire algo triste, esto no era lo que pensé que sucedería.

— Si, créeme que esto es lo mejor. No teníamos futuro y creo que lo sabías desde el inicio, solo necesitaba darme cuenta de ello— volteo a observar a nuestros hijos— ¡Jania!

Comenzó a llamarla tan repentinamente que me desconcerto un poco el que lo hiciera, aún más por lo que acababa de pasar con nosotros.

Nuestros hijos solo pararon de jugar y se acercaron al llamado de Jane que parecía estar más concentrada viendo a Jania acercarse.

— ¿Qué pasa, mamá?— preguntó John poniéndose enfrente de Jania.

— Nada que te incumba, lisiado— oír esas palabras salir de su boca fue donde todo se quebró, no lo soporte en lo absoluto.