El

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El era especial, recuerdo cuando me acercaba a él, sus labios rozaban con los míos, cada vez más cercanas hasta llegar a juntarnos sin dejar ningún espacio, ese momento era perfecto, me hacia sentir única y querida ,nunca me había sentido así, supe que él me quería más de lo que me había querido antes.

Sus labios, eran suaves como una pluma, lisos como una pared en buen estado, cálidos como una fogata, pero en ellos había algo más, algo especial, tenía esa sensación cuando tocaba mi boca, mis mejillas, mi cuello y todo el contacto que tenía con mi piel .

El me quería con todas mis locuras, mis rarezas, mi forma de mentir y mi mal comportamiento o al menos eso creia, soy una tonta por lo que hice, fue mi mas grande tontería y no pude hacer nada.

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