Y todo sigue igual.... ¿Cierto?

Prólogo

-Suerte amigo!- gritaba Jess mientras veía a su compañero subir a la cabina de abordaje. 

Joel al parecer no lo había escuchado con todo lo que andaba haciendo, pero aún así volteo a verlo y le dirijo una gran sonrisa con los pulgares de las manos arriba antes de que se fuera de la vista de su amigo.

Jess lo vio desaparecer dentro del avión. Su corazón latió más rápido y se hiperventiló por lo que había pasado, esto provocó que unas náuseas lo inundarán y la vista se le nublara. Tuvo que rápidamente sentarse en la banca más cercana y empezar a calmarse.Había pensado que iba a ser más fácil. Ir ver al chico que durante mucho tiempo había amado en secreto era algo que pegaba fuerte, más si ese chico era tu mejor amigo.

El tiempo pasaba al igual que las personas de su alrededor, y pequeñas lágrimas estaban ganando una lucha con sus ojos.

 Lágrimas de alegría? No. 

Lágrimas de tristeza y desesperación? Sí. 

Se sentía vacío y solo. Ni siquiera sabía qué hacer pues jamás le había podido decir eso que sentía a su querido compañero,  por eso esa razón se castigaba en sus pensamientos.

Estando ahí sus ojos captaron a una pareja de chicos caminando de la mano. Uno de ellos le dio un tierno beso en la mejilla al otro, y esto fue lo que derramó la gota del vaso para cederle la batalla a sus ojos, y empezaran a brotar un rio de lagrimas mientras recordaba cada pequeño momento que había pasado con él; desde que se conocieron, hasta sus últimos momentos juntos...

------------------------ - - - - - - - - -3 años antes - - - - - - - - - - - ----------------------

-Agh. Es enserio? De todo lo que podía haberme pasado esto es lo que menos me imaginaba que pasaría.

Estaba arruinado. Completamente mojado de cabeza a los pies, y lo peor? No encontraba mi querida cartera. Tenía tantas ganas de ir a esa reunión que hasta había salido 30 minutos antes de la hora planeada, pero para mí suerte un accidente en el transporte provocó que me fuera caminando los pocos metros restantes.La verdad no me importaba caminar (pues soy muy atlético) y además así podía ubicarme mejor en este lugar desconocido.

Pero ahora todo lo que tenía planeado se había echado a perder con ese pequeño percance.

"¿Qué hacer?" me repetía a mí mismo en mi mente mientras una oleada de tristeza combinada con amargura y enojo me inundaba.

La (tarde) noche estaba bonita a pesar de todo. Me dije a mí mismo que si ya había salido algo mal, no creía que otra cosa pasara, y empece mi camino rumbo a casa.

Bañarme, comer algo y además ver Netflix eran las cosas que estaban en mi lista para hacer cuando llegara a casa, quien diría que iba a cambiar un poquito pues al estar frente a mi puerta un chico dormilón andaba sentado ahí mismo.

- Ammm hola?.... - susurre a su oido.

El chico se levanto rápidamente medio perdido en sus sueños

Tal vez había sido mi aliento en su oreja pues inmediatamente se llevo las manos a la cabeza y después se quedo pensando.

Me miro durante un momento y  alce mi ceja en modo de media incomodidad.

-Y bueno?- dije un poco alto pues parecía no querer decirme nada.

Levanto la vista hacia mí y me quede medio lelo por el rostro que me miraba.

Gracias a la luz de afuera de mi casa pude ver completamente su cara que era de un moreno claro. tenia la cabeza llena de chinos algo rizados, y ojos dormilones. inmediatamente movió algo en mi pues aunque el chico no parecía modelo de revista, se me hizo muy guapo.