Novios parte 2

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Narrador omnisciente.

Ae regreso al cuarto donde Pete se encontraba y este ya había puesto la película, la elección de este fue una película romántica muy conocida "COMO SI FUERA LA PRIMERA VEZ", película donde se muestra la extraña relación romántica entre Henry y Lucy. Él es un veterinario marítimo viviendo en Hawái, que acostumbrar enamorar a los turistas para tener fáciles relaciones que no obstante terminarán cuando ellas regresen a su lugar de origen. Ella es una joven maestra que, a consecuencia de un accidente automovilístico, sufrió un daño cerebral que hace que cada día su memoria se borre, olvidando lo que ocurrió el día anterior. Cuando se encuentran, ambos sienten atracción mutua, y Henry decide olvidar sus fugaces conquistas para sentar cabeza con Lucy. Pero ella, desde luego, no lo reconoce al día siguiente. Y así comienza una extraña labor para enamorar diariamente a la muchacha, y tratar de hacer que, de algún modo, la relación funcione para ambos. .

Ambos jóvenes se encuentran en la cama del dueño de la casa, Ae con su espalda recargada al respaldar de la cama con Pete sentado entre sus piernas descansando su espalda en su pecho mientras sobre sus piernas sostiene una pana de palomitas de maíz y sobre la mesita de noche se encuentran 2 vasos de Coca-Cola.

- Sabes Pete, si mañana tú me olvidaras yo estoy dispuesto a recordarte que me amas y el porqué estamos juntos.

-¿Pero si te olvido cada noche mientras duermo?, ¿tú te encargarías de hacerme recordarte y recordar nuestro amor?.

- Claro que sí, eres mi novio y haré que me recuerdes aun si todo el mundo estuviera en nuestra contra.

- Eso es muy lindo de tu parte- dijo él peli castaño para ver en dirección a su pareja y darle un beso en su mejilla izquierda.

-Oye, quiero otro beso, pero esta vez en los labios- pronuncio él peli negro con una hermosa sonrisa.

-Que cosas dices- pronunció un tímido Pete, escondiendo su rojo rostro de su novio en el pecho del mismo.

-Ae tomo su barbilla sacando a un sonrojado Pete de su improvisado escondite, lo vio directo a sus ojos color miel para luego unir sus labios en un cálido beso, dulce y tan puro como el amor que siente el uno por el otro. Terminaron de ver la película para luego caer rendidos en los brazos de Morfeo, soñando ambos con un dulce futuro donde sus vidas se unan para ser una sola, ¿pero esto durará toda una vida?.

A la mañana siguiente Pete se grabó por los débiles rayos de luz que se filtraban atreven de las cortinas de la ventana frente a él, iba a levantarse hasta que noto que unos brazos lo tomaban duro de su cintura y una cálida y pausada respiración daba contra los velos de su nuca erizándolos.

-Ae suéltame debo ir al baño.

-No quiero, en la tarde llega mi hermana y el domingo en la noche mi mamá, quiero disfrutar de tu cercanía sin nadie que nos esté haciendo bromas o avergonzándonos.

-Pero si no me sueltas, me haré sobre las cobijas, en serio ya suéltame- pronunció un muy avergonzado y rojo Pete.

- Está bien- pronunciado un Ae aún medio dormido, quien soltó poco a poco a su novio y se dispuso a desperezarse para salir de la cama a hacer el desayuno para ambos.

Cuando Pete bajó a la cocina se encontró en la isleta un nicaragüense, compuesto por gallo pinto con huevos revueltos y tortilla, acompañado con una taza de café negro.

-Ae se ve todo muy rico.

- Lo mejor solo para el mejor novio del mundo.

-No digas esas cosas que me da vergüenza Ae.

-Pero a mí me gusta llamarte así, se oye muy bien la palabra NOVIO.

Pete se sonrojó tanto que parecía un tomate maduro, todo su cuello, cara y orejas están de un intenso rojo-Mejor sentémonos y comamos.

-Claro bebé, pero solo si me das un besito aquí- dijo Ae señalando sus labios, su castaño novio se rio nervioso para luego acercarse a él y dejar un suave y dulce beso en la comisura de sus labios.

-De acuerdo ahora si comamos- menciono un aún más rojo Pete para sentarse en su silla y comer su desayuno.

Por otro lado, se encontró él peli negro distraído en las hermosas fracciones de su rostro, especialmente en esos ojos, cual cielo nocturno donde las estrellas brillan con mayor intensidad, tanta era su ensoñación que no se dio cuenta cuando el castañito acabo de desayunar, solo salió de dicha ensoñación cuando Pete paso una de sus delicadas manos muy cerca de su rostro.

-Ae Ae Ae Aeeeeeeeeeee, oye no me estás prestando atención_dijo este con un puchero.

-Lo siento bebé es que me perdí en las estrellas que viven en tus ojos.

-El rostro del tierno castaño volvió a transformarse en un tomate maduro de lo rojo que estaba, al notar el apodo tan cariñoso y lindo con el que su desde ayer novio lo llamo de nuevo, su reacción no fue la misma a la de hace unos minutos, pues creyó escuchar mal, pero ahora que lo repitió Ae no queda duda que no se lo imagino y este en realidad salió de los belfos del peli negro.

-Aeeeee, ya te dije que no digas cosas vergonzosas, mejor veamos la película de anoche de nuevo, pues me gustó mucho, sí, siii di que sí.

-Está bien, sube a mi habitación, date un baño y usa la ropa que más te gusta de mi armario, cuando estés listo me llamas y yo subiré con golosinas para comer durante la película.

-De acuerdo Ae, pero tú debes ducharte, mejor ve tu primero a tomar un baño, no es justo que yo invada tu habitación y tengas que esperar por mí.

-Oye bebé tranquilo, yo me bañaré en el baño principal de la casa y tomaré ropa limpia del tendedero, no te preocupes por eso y mejor sube a bañarte tranquilo que yo haré lo mismo.

-OK-mencionó a Pete para luego dar un beso en su mejilla y salir corriendo rumbo al baño.

-no cabe duda que me trae loco_mencionó Ae y luego tomo rumbo al baño.

Un amor puro (AeXPete)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora