Parte 4

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Maldita pesadilla empedernida de dolor, esto tiene que ser una broma o un maldito chiste de mal gusto

 Hace rato estoy agonizando de dolor y colapsando en la locura, perdí la fuerza para hablar o emitir otro sonido que no sea mi ronca y susurrante agonía 

 Veo mi miembro colgar del hocico de una de esas bestias y basto solo un segundo para que el tiempo se parara en seco, incluso algo tan inmensurable como el tiempo es relativo

 Cada segundo pesaba como una hora, en mi mente escaseaba espacio para pensar en algo distinto que no sea implorar por mi temprana muerte

 Al percatarme de tan horrenda situación la muerte me miraba desde hace unas... Bueno, no lo se, solo sé que desde que salió de ese lago, noté mi incapacidad por despedirme de la vida involuntariamente, estaba vivo porque así ella lo decidió

 Ella estaba ahí, parada e inerte, sin decir nada, solo mirándome mientras yo sufría un indescriptible sufrimiento a quema ropa

 Ah... La muerte tenía forma majestuosa, era una sombra inmensurable sin rostro ni cuerpo, supongo que esta es la parte donde empiezo a delirar 

 Sentí vergüenza de mí mismo al verme en este estado tan deplorable

 Una lágrima estaba a punto de salir, no era una de dolor, sino una de amor y nostalgia por la vida 

 La muerte por fin se acercó a mí, sentí paz. Mis heridas dolían menos o menos ganas tenía de morir 

 Ella secó mis lágrimas mezcladas con la sangre que posaba en mi cuerpo y me dijo que todo estaría bien 

 Cerré los ojos por fin, aunque no tenía idea de que iba a expiar mis pecados siendo prisionero de la muerte en el infierno 

 Los poetas han de sentir envidia o lástima por mí, la muerte se compadeció de mi llanto o simplemente le daba lastima mi gruñir.

MugreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora