𝐋𝐞𝐭'𝐬 𝐭𝐚𝐥𝐤 𝐚𝐛𝐨𝐮𝐭 𝐱𝐱𝐱! ►︎ 𝐖𝐨𝐧𝐊𝐲𝐮𝐧 [ ADAPTACIÓN ]

V.

El apartamento de Wonho era más pequeño que el de Changkyun, pero era acogedor. Había una cocina, un pequeño cuarto de baño y un dormitorio. Nada especial, pero todavía acogedor. La principal diferencia de sus apartamentos fue que el de Changkyun estaba muy ordenado mientras que el de Wonho parecía ser bastante caótico. Su cama estaba sucia y la ropa al azar estaba esparcida sobre ella. La otra esquina de la habitación estaba llena de libros, cuadernos y papeles sueltos. Pero el pequeño caos hizo que la habitación parezca más bien animado.

—Toma asiento en el sofá mientras limpio un poco. — dijo Wonho tímidamente.

—No hay necesidad de hacer un alboroto por mi culpa. —Changkyun sonrió.

—Lo siento, yo no esperaba ninguna visita. —Wonho se disculpó, reuniendo la ropa y metiéndola en un armario.

Changkyun se recostó sobre el sofá y miro al otro. En cuanto la ropa sobre la cama se fue, hizo que Changkyun se pusiera nervioso por lo familiar que se veía. La había visto varias veces en las fotografía de Wonho antes y le traía recuerdos. Cuando Wonho volvió, cogió un teléfono móvil de su escritorio y lo encendió.

—¿Qué es eso? —preguntó Changkyun.

—Mi teléfono para el trabajo. — respondió Wonho.

—¿Con el trabajo te refieres a la línea directa? ¿Vas a trabajar mientras estoy aquí? —Changkyun se sorprendió.

—Sólo si no te importa. Siempre tengo el teléfono encendido cuando estoy en casa. — dijo Wonho casualmente.

—No me importa. —Changkyun lo tranquilizó. Su curiosidad había despertado. —¿Qué te hizo elegir este tipo de trabajo? —Changkyun preguntó cuando Wonho había tomado asiento a su lado.

—Siempre ha sido mi sueño estudiar en Seúl y necesitaba un trabajo que pagara lo suficiente con un esfuerzo mínimo para que pueda concentrarme en mi educación. El trabajo paga bastante bien -, explicó Wonho.

Hubo una pausa incómoda. Los padres de Changkyun eran afortunadamente capaces de pagar por lo que nunca había tenido que preocuparse por ganar dinero.

—¿Quieres beber algo? —Wonho interrumpió el silencio.

—Agua sería genial. — dijo Changkyun.

Un momento después, Wonho regresó con dos botellas de agua refrigerada. Con un gesto agradecido, Changkyun aceptó la botella y bebió unos sorbos.

—Pensé que elegiste el trabajo porque estabas siempre caliente. —Changkyun rió.

—Bueno, lo estoy. —Wonho sonrió. —Pero eso es otra historia.

—¿Qué tipo de personas te llaman? —Changkyun quería saber.

—Todos los chicos son de diferente tipo. Chicos que quieren descubrir su sexualidad por medio de otro chico, pero nunca se atreverían hacerlo en la vida real. La primera vez que te escuché pensé que eras uno de ellos.

Changkyun le dio al otro una mirada juguetona pero lo dejó continuar.

—Creo que la mayoría de los chicos que llaman quieren vivir sus fantasías secretas de alguna manera. — explicó Wonho.

—Apuesto que algunos de ellos son pervertidos enfermos. —dijo Changkyun.

—Algunos de ellos. Yo trabajo para la línea directa desde hace meses y he aprendido mucho sobre la gente.

—¿Qué aprendiste?

—Que todo el mundo tiene fantasías sexuales, pero la mayoría de ellos no tienen el coraje de hablar de ello con su pareja. —Wonho dijo, rodando la botella entre sus manos cuidadosamente.