_sin tiempo en la espiral_

"Aquel chico..."

"Aaaaaagggghhh" , "que patético es todo esto" , "¿que sentido tiene vivir?" , "¿que se supone que deba hacer aquí?", "¿puedo hacer lo que yo quiera?"

Pensamientos provenientes de aquel chico , no destacable en la escuela , ni en la vida , llamado Marco.
Con tan solo 21 años , dejo de creer en todo lo que hace en su vida diaria , no logra sentir alegria alguna.
Viviendo en un pequeño pueblo llamado "Atlihuetzy", un pueblo tan pequeño , en donde la mayoría de las personas en él se conocían , pocas personas ajenas a este , lo visitaban , debido a la poca escases de lugares interesantes o maravillosos.
Los pocos amigos que Marco tuvo , siguieron con sus vidas , excluyendolo a él de ellas. Su antigua pareja , era una chica tan maravillosa que al final resulto ser demasiado buena para él , todo fue en declive , en descenso , caída en picada , hasta que todo colapso , y se destrozo en miles de pedazos, algo que no se podia arreglar.
Marco dejo de creer en el amor , ya que todo siempre terninaba con los mismos resultados. Él siendo el culpable del fracaso en la relación , echando a perder todo lo especial en ella , como parásito , devorando todo lo bueno y puro en las personas que lo rodeaban. Por el bien de las personas que tanto llego a amar , se vio obligado a alejarse de ellas por su seguridad. Empezó a trabajar en una tienda de abarrotes , durante las noches , total , el siempre sufria de insomnio , no podia dormir en lo absoluto , así que tal vez podría aprovechar ese tiempo haciendo algo productivo , al final podría ganar un poco de dinero.

(00:08 a.m.)
*Suena un timbre*
*Marco se aproxima a la ventanilla de la tienda*

Ha llegado otro cliente a tales horas de la noche.

-Buenas noches. ¿Que se le ofrece?

- Dame unas cervezas

Tal cliente era aquella chica , de clase alta con unos modales de porqueria , tratando mal a las demas personas que no eran de su mismo nivel , que llegaba prácticamente todas las noches , escabullida de sus padres , siempre acompañada de su grupo de amigas , iguales a ella o tal vez peores.
Marco no podía decirles nada al respecto , por mas que lo trataran de forma grosera , a Marco no le afectaba ni lo mas mínimo la actitud de aquellas  chicas.

*Marco le entrega las cervezas*

-Gracias ... Puerquito oink oink , ¡JAJAJAJAJA!

*Le arroja el dinero a Marco*
*Marco cierra la ventanilla*

Marco escucha como las chicas se carcajean , mientras se marchan en su Audi A3 Rojo.
Esta , al igual como las anteriores y futuras noches eran y seran iguales .
Llegan personas amables , y algunas que no. Así es el trabajo , como todos.

Marco se pasaba esas horas , con mucho aburrimiento encima suyo.

-Creí que trabajar aquí me traería algo diferente que sentir , y me equivoque , no hay nada de emocion en este lugar... , pero aun así es mejor que estar en casa , tengo una vista diferente aquí de todos modos . *(Pensaba Marco)*

Ya era la mañana , su turno habia acabado , y era hora de que Marco se fuera a casa. Caminando por aquel Boulevard , que acortaba la distancia de la tienda y la casa.

*Abre la puerta principal de la casa*

Mientras Marco va entrando a su casa , oye unas pisadas apresuradas de su pequeña gata , acercándose al chico mientras  maúllaba.

-Ey , hola , vienes a darme la bienvenida , que linda eres.

*(Dice Marco , aunque sin entusiasmo , ni sonriendo , mientras le acaricia su cabeza a la pequeña mascota y ella como respuesta se desliza tallandose en su pierna derecha , como es usual de los mininos)*

Alimenta a su gata , Marco toma un poco de agua , y se dirije a su habitación , a tomar un breve descanso.
Se deja caer sobre la cama , boca arriba , con los brazos extendidos , mientras mira fijamente al techo color blanco.

-Que día de , ....mierda.  Agggg ...

*Bosteza*

Al poco tiempo se queda dormido aquel chico , esperando a que sea la hora de irse de nuevo a aquel lugar.