CAPÍTULO UNO ☆

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Mi primer día de universidad, estoy emocionada y a la vez algo nerviosa porque tengo miedo de las nuevas experiencias que tendré.

Estaciono mi coche en el estacionamiento de la facultad y salgo cargando mi bolso en la mano, cierro la puerta mirando a los alrededores y... al instante me doy cuenta de algo.

—No, no, joder—maldigo mientras golpeo la ventana del coche esperando a que mágicamente se abra. Gracias a mi despistada yo, ahora tengo la llave dentro del auto y no podré abrirla—Mierda.

Jadeo llena de estrés y angustia, y los demás estudiantes que pasan me miran.

Genial, primer día y ya estoy actuando raro.

—¿Necesitas ayuda?—escucho una voz a mis espaldas, me volteo como si hubiese sido el llamado de un ángel.

—Si, se me quedaron mis ...—mi voz se fue apagando poco a poco al ver a un joven muy atractivo con un físico muy impresionante.

Era alto, de cabello negro, lo que mas sobresale de él son aquellos ojos verdes que trae, sus rasgos faciales son de otro planeta y podría atreverme a decir que estaba bendecida al verlo tan de cerca.

—¿Las llaves dentro del coche?—exclamó sacándome de mis pensamientos y bufo con gracia—Puedo ayudarte.

Rebuscó entre sus cosas y sacó una especie de llave pero no era una llave, yo lo miraba con extrañeza y desconfianza.

—Pero, ¿qué es eso?—pregunté confundida. Es raro.

—Es una ganzúa—respondió y empezó a hacer trucos en la cerradura de la puerta y con otro objeto igual, que no se de donde sacó, empezó a maniobrar la cerradura.

¿Ganzúa? es algo que nunca en mi vida he escuchado.

Tenía miedo, no sabía qué clase de cosa estaba haciendo con mi auto, podría ser muy guapo y todo, pero seguía siendo un desconocido.

—Ten cuidado ¿si?, es un coche muy caro—dije mientras sentía que estaba rayando la pintura.

—Eso lo sé— dice y continúa en lo suyo.

—Pero parece que no sabes lo que haces, ¿crees que es una película donde abren las puertas de las casas con pinzas y eso?

Me miró fijamente y me quedé quieta, tuve que obligarme a mantener la mirada y tragué saliva.

Sin quitar su vista de mi, hace otro movimiento en la cerradura y de pronto suena un particular "tic" que significa que el seguro ha sido desactivado. Abre la puerta y yo me quedo estática.

—Un gracias no estaría mal, señorita—dijo con gracia, levantando una ceja.

—Bueno, disculpa...y gracias—digo sintiéndome un poco tonta.

—Está bien, procura no olvidarte de otras cosas—mencionó antes de marcharse y perderse entre la multitud.

Cierro bien el coche antes de volver a caminar y tomar mi móvil.

¿y mi móvil?

Suspiro agotada mientras vuelvo a abrir la puerta del coche.

Este será un día largo.

Mis tres primeras clases estuvieron tranquilas para ser el primer día, pero sé que esto no será así por mucho y que pronto empezará el fastidio.

Bebo de mi café matutino mientras mato el tiempo revisando mis redes sociales, aún no he conocido gente, no suelo ser muy social y la verdad me da miedo el rechazo por lo que prefiero no molestar.

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⏰ Última actualización: Jul 29, 2023 ⏰

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BAJO LAS ESTRELLAS (en edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora