Medicina + Mecánica

Capítulo 5: Mi historia, Trafalgar

Los siguientes días y semanas fueron... ¿Cómo decirlo? Jodidamente irritantes, el pelirrojo iba todos los días a cuestionarle su relación, hostigarlo con preguntas y pidiendo explicaciones como si tuviera el derecho a hacerlo, ¿No se daba cuenta que el tiempo corría y ellos lo perdían peleando en vez de hacer el puto proyecto? Esa mañana había amanecido más irritable que de costumbre... y el mero hecho de ver al menor acercarse ya le puso furioso.
- Tenemos que hablar - el pelirrojo se le puso en frente y Law no hizo más que rodar los ojos y mirarlo fijamente el tiempo necesario para que se sintiera incómodo... mas cuando el pelirrojo no le evitaba la mirada solo lo empujó con el hombro.
- Quítate del camino imbécil - Law le caminó por el lado sin quitarle los ojos de encima... ¿Cómo le hacía Kid para seguir mirando y no apartar los ojos? Law estaba seguro que se había quitado al menor de encima mas el pelirrojo le agarró del brazo, suave, como pidiéndole permiso, Law sintió ese toque, no le estaba obligando y era casi asustado... recordó de inmediato cuando Smoker le agarró la muñeca en su departamento y Law instintivamente sacó el brazo de un tirón y siguió caminando hacia el casino. Kid suspiró sin poderlo evitar, ya había tratado de todas las formas y no conseguía que el moreno hablara con él, ya estaba aceptando que tendría una pésima nota en el puto proyecto.
- ¿Law? - Shachi lo miró y vio al pelirrojo atrás.
- Ni se te ocurra decir nada - el moreno simplemente pasó de su hermano.
- Esto va de mal en peor - murmuró Bepo.
- Y yo que creí que con Kid iba a dejar a Smoker - Pen se tapó los ojos y suspiró.

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Ese día se cumplían 3 semanas de que Kid le preguntara a Law si era gay, el pelirrojo iba por su último intento y lo iba a dar todo. Había seguido al moreno por todos lados buscando algún indicio de algo que le gustara y al parecer lo había encontrado: las flores. Algo tan simple y tan complejo como el mismo médico, lo había visto contemplar las violetas de su patio y decidió llegar a él de esa manera. Ahora Trafalgar estaba con sus hermanos, no quiso pedirle ayuda ni a Pen ni a Killer, quería hacer eso él mismo. Suspiró y se acercó al moreno mientras conversaba con Pen y el chico de gafas, caminó silenciosamente y apenas estuvo detrás del moreno le rodeó la cara con el brazo, enseñándole la flor que llevaba en su mano. Law parpadeó algo confundido y analizó lo que tenía frente a sus ojos, una pequeña flor de un hermoso color azul, era una orquídea, en su interior el moreno sonrió al recordar el significado de esa flor en particular con ese color en particular y ya sabía quién estaba haciéndole ese detalle.
- Vengo en son de paz - dijo Kid al moreno que le miraba - ¿Podemos hablar? - Law volvió a poner los ojos que incomodan a la gente y Kid le sostuvo la mirada, el pelirrojo le miraba como queriendo derretir sus ojos de hielo y cuando no consiguió que apartara la vista suavizó la mirada y tomó la flor de la mano del menor. Kid vio al moreno tomar delicadamente la flor y llevarla a su cara, olió su suave aroma y sonrió... sonrisa que le dedicó y sin decir nada empezó a caminar a su cabaña. Kid quedó algo encandilado con esa sonrisa tan sincera y solo vio al mayor alejarse sin decir nada, algo le decía que había tocado algo en él que le hizo dedicarle esa sonrisa tan hermosa para él.
Law estaba en su habitación contemplando la hermosa flor en sus manos, sin poder dejar de pensar en el pelirrojo, la última vez que le habían dado una flor fue en su primera relación con ese pecoso adorable. De repente escuchó la puerta de la cabaña y dejó la flor rápidamente en el mueble al lado de su cama.
- ¿Law? - su hermano menor le encontró tirado en la cama - Mira nada más quien descubrió que te gustan las flores - le dijo con una sonrisa.
- Cállate Pen, Killer o tu debieron haberle dicho - supuso con tal de alejar al menor.
- Pues déjame decirte que Killer ni siquiera lo sabe y yo no le dije - dijo alzando los brazos inocente.
- Es solo un idiota con suerte - dijo refiriéndose al pelirrojo.
- ¿Sabes lo que yo pienso? - Pen puso una sonrisa juguetona - Que te gustó - dijo mirándole - Te gustó Law, no me lo puedes negar - su hermano le miraba como si se le hubiera caído medio cerebro.
- Imposible Penguin - dijo negando con la cabeza.
- Ya, y yo te conocí ayer - el castaño miraba a su hermano - Si aún tienes la flor ahí - dijo apuntando la mesita de noche.
- Eso es solo... porque es una linda flor - trató de excusarse el moreno.
- Law, hermano, puedo dar mi cabeza que te gusta Kid, aunque sea un poco, es uno de los pocos que te puede la mirada, es uno de los pocos que te saca de quicio tan seguido, es uno de los pocos que te está haciendo sentir de nuevo, dime si Smoker siquiera sabe que te gustan las flores - Pen le miraba con una sonrisa - Dale una oportunidad - de repente alguien tocó la puerta.