Wherever you are [Inosuke]

Cap. 1

Espero les guste el cap! ༼ つ ◕_◕ ༽つ

ᵐᵃᵈᵉ ʷⁱᵗʰ ˡᵒᵛᵉ

Apenas eran las 12:00 pm y el sol empezaba a calentar; mientras que caminaba la pelinegra en aquel sendero que estaba rodeado de cultivos y mas de alguna vivienda o montañas en el fondo. Su paso era un poco lento, pues el dolor que se ubicaba en su pierna derecha era un tanto molesto como para acelerar el paso además no tenía prisa de llegar o siquiera tenía un rumbo, no hasta que aquella hermosa ave de alas rojas que ha acompañado su camino y a su familia por generaciones le informó de su nueva misión un tanto improvisada.

Agata: en el bosque, en la punta de la montaña hay tres cazadores que se enfrentan a unos demonios, uno de ellos es un ex Luna inferior. Hay un rehén y algunos heridos. - dijo mientras volaba cerca de la chica. -

Suki: bien!, por favor busca una ruta mas corta, no quiero llegar tarde - dijo rápidamente - yo te seguiré - alzó la voz al ver aquella hermosa ave ya en los cielos -

Volando rápidamente buscando algún camino mas corto o siquiera un atajo, pues de dónde se encontraba estaba un tanto lejos, estimaba una hora y media si iba por el sendero sin embargo podía cruzarlo desde el bosque y sin mas el ave se dirigió hacia el bosque siendo seguida por la pelinegra. Sin importar el dolor en su pierna la chica saltó, saltó lo suficientemente alto como para poder alcanzar una rama subiendo en esta y así utilizar las ramas para impulsarse en estas; ya pasadas mas de treinta minutos la respiración agitada por el cansancio además de una fina capa de sudor en el cuerpo de la chica hacían mas difícil el poder seguir adelante en aquel frío y oscuro bosque donde la luz del sol era bastante leve molestando su vista, temiendo donde pisaba y con mas razón por aquella pierna que fue rota por una pelea pasada con un demonio, temía que sangrara pues sin importar que aun sea de día el bosque es suficientemente oscuro como para que un demonio se la pase por ahí tranquilamente.

Sin importar que su vista no haya sido la mejor de la familia su olfato claro que lo era, saltando prácticamente a ciegas utilizando nada mas su olfato como guía, las ramas de los árboles poseían un olor a humedad y a musgo que era sencillo saber cuando estaba una rama enfrente. Aceleraba su paso cada vez que podía con la inquietud de llegar a tiempo, y no, no era por que su madre la esperaría con un gran castigo si eso pasase, si no que no se permitiría que alguien llegue a salir tan lastimado por su falta de capacidad.

Entre saltos un olor conocido inundó sus fosas nasales, hacían falta mas de 50 metros para llegar al lugar y el olor se podía distinguir fácilmente; "sangre" susurró un tanto alarmada preguntando cuanta era la cantidad para que ese olor sea tan fuerte. Un par de minutos fueron necesarios para que la chica haya podido llegar, en cada paso que daba el olor era mas fuerte e innecesariamente cegante; su vista parecía nublarse por aquel olor que la hacía marearse mientras que caminaba rodeando la casa llegando a la parte de enfrente pudo ver un cuerpo, un cuerpo que la sangre pintaba el yukata que el hombre cargaba puesto e inmediatamente olvidó aquellos problemas que había tenido antes y con sumo cuidado se acercó para luego moverlo y poder sentir algo de vida en el, sin embargo ya no había ningún signo de vida, su piel blanca y fría al tacto, sus ojos que se encontraban abierto de par en par siendo cerrados cuidadosamente por la chica.

Suavemente puso el cuerpo en el frío suelo, mientras unas cuantas lágrimas salieron de sus ojos cuando observaba aquella sangre que estaba en sus manos; solo dió un pesado suspiro que expresaban miles de palabras nunca dichas, luego se levantó del lugar y recorrió con la vista mientras limpiaba sus lentes que habían sido manchado con lágrimas. No parecía nada fuera de lugar, árboles, plantas hasta que una pequeña caja marrón de madera llamó su atención; olía diferente a los olores del lugar, tenía una gran presencia de un humano pero no percibía ese olor rancio característico de los demonios asi que no lo tomó como una amenaza sin embargo no quería fiarse de un simple olor.