| Síndrome De Estocolmo | Kim Taehyung Y Tú | +18 |

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Narra T/N:

Ya habían pasado cuatro días desde que conocimos a Jungkook. Hoy era viernes. Jungkook con los días se ha abierto más con nosotros, al parecer él y Mimi comparten muchos gustos, a ambos les apasiona tanto el baile como el canto, en sus tiempos libres les gusta hacer ejercicio o ver series.

En el liceo la situación con mis amigos iba bien, aunque en mi casa no tanto. Por orden de mi papá de ahora en adelante dos guardas espaldas serán asignados para llevarme y traerme del colegio. Estoy en la misma situación que Jin, solo que en el caso de él no es tan obligatorio.

Estábamos en hora de receso. Decidimos sentarnos en el pasto cerca de un enorme árbol el cual nos brindaba un poco de sombra.

Jimin: ¿Mañana tienen planes?

Jin: Además de las tareas no tengo nada que hacer mañana. — Contesta despreocupado.

Kook: Yo igual, luego ¿qué planeas Jimin-ssi? — Mimi sonríe al ver que kook lo llama así.

Jimin: A las afueras de Seúl habrá una feria, la entrada es para todo el público, ¿vamos?

Sonreí ante la idea de ir con mis amigos a una feria. Pero, había un problema...

Tú: No sé si mis papás me dejen. — Hago una mueca.

Jin: ¿Por qué lo dices? Tus papás no son de esos que te ponen peros si vas a salir con nosotros.

Tú: No, no, el problema no son ustedes chicos, sino que mis papás aunque más que todo mi papá ha estado muy al tanto de mi seguridad y tal vez si voy iría con un guarda espalda o algo por el estilo.

Quiero ir, pero tampoco quiero dañarle el plan de mis amigos yendo con un señor de traje negro, lentes negros y con una cara de roca.

Kook: ¿Qué hiciste para que tu papá esté así contigo? — Pregunta algo curioso.

Trato de encontrar en mis recuerdos si en los últimos meses he hecho algo para poner en riesgo mi seguridad o la de mi familia, pero realmente no encontraba nada.

Tú: Que yo me acuerde nada. — Bufo. — Solo espero que esta situación termine.

Jimin: Si quieres podemos hablar con tus papás. — Jin concuerda con la idea de Mimi.

Lo pienso un poco, tal vez con ayuda de ellos podré ir libre sin ningún guardia al culo mío.

Tú: Lo llamaré ahora mismo. — Del bolsillo de mi falda saco mi celular y comienzo a buscar el número de mi padre.

Jin: Ponlo en altavoz. — Obedezco ante la sugerencia de Jin.

Después de unos cuántos timbres al otro lado de la línea de escucha la voz de mi papá.

Papá: ¿Diga? — Se escucha entre jadeos.

Tú: Eh, hola papá, te llamaba para saber si mañana puedo ir a una feria con mis amigos.

Papá: ¿Con tus amigos? Si, si ve. — Los jadeos iban disminuyendo.

Tú: Pero ¿será que podré ir sin ninguno de esos fastidiosos guarda espaldas?

Papá: Si mi amor como quieras, — Al fondo se escucha un estruendo. Intercambio mirada con mis amigos. — Te veré luego. — Cuelga.

Kook: ¿Qué demonios estaba haciendo tu padre?

Yo también me hacía la misma pregunta. Solo me limité a responderle con un alzamiento de hombros.

Jin: Pero te dijo que nada de guardias, es algo bueno.