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"Amigo inmortal, no sé qué pasó ayer en el Cementerio... El Huevo del Rey Demonio..." Feng Ziying interrumpió los pensamientos de Han Yu.

Han Yu volvió su mirada hacia él.

Feng Ziying sabía vagamente que el llamado sacrificio era para incubar el Huevo del Rey Demonio.

Pero para crear la ilusión de armonía en la frontera y pedirle crédito a la Emperatriz, en realidad hizo un trato con los demonios para donar gente como sacrificio, aunque eso le trajera interminables problemas.

Han Yu le miró fríamente como si pudiera ver su mente con claridad.

La expresión de Feng Ziying era fea, y dejó de mencionar este tema.

Después de pensarlo un momento, no pudo evitar preguntar por "esa persona" de la que se preocupaba la emperatriz.

"No sé cómo le va a tu tío maestro, el Señor Inmortal Han Yu, estos días". Cuando Han Yu escuchó esto, le miró fríamente y escupió lentamente dos palabras: "No lo sé".

Simplemente no quería lidiar con estos problemas. El falso sentimiento de la gente, y que se aferraban deliberadamente a él. Así que esta vez, bajó la montaña con la identidad de Shang Yuan.

"Durante mucho tiempo, he oído hablar del nombre del Señor Inmortal Han Yu, tales técnicas de espadas, alquimia, instrumentos musicales, magia, todos competentes. El país de Zhu Yun no ha podido encontrar una segunda persona como él desde la fundación del país. Incluso Su Majestad está llena de elogios. Pero esta simple persona ha estado admirando durante mucho tiempo pero no conoce su verdadero rostro. No sé si el amigo inmortal puede presentar..."

Han Yu había cerrado los ojos cuando escuchó esto, y ese rostro perfecto enfriado por el hielo parecía estar a mil millas de distancia.

Feng Ziying estaba descontento, pero sólo podía dejar de molestarlo.

Han Yu quería descansar, pero su oído era extremadamente sensible. Podía oír sonidos en un radio de varios metros.

Un sonido nítido en medio del ruido llegó a sus oídos.

No pasó mucho tiempo antes de que la chica conversara con el general Zuo.

"El General monta muy bien a caballo. ¿Puede enseñarme?"

"El General es realmente joven y prometedor."

"El General es tan poderoso. ¿No te has casado todavía?"

"Debes ser muy bueno con tu esposa."

Han Yu frunció el ceño de repente y quiso poner un hechizo de aislamiento acústico para bloquear el sonido.

El convoy ya ha entrado en la ciudad de Dongling.

En cuanto Lin Xiaocha entró por la puerta de la ciudad, se encontró con que muchas miradas se posaron en ella. Al ver que no estaba muerta, los ojos de la gente de la ciudad se sorprendieron.

"¿No está muerta?"

La gente dejó su trabajo y rodeó a Lin Xiaocha en el caballo.

Frente a la gente que se acercó a mirar, Lin Xiaocha tembló y mostró un poco de pánico.

En este momento, el General Zuo detrás de ella dijo: "No te pongas nerviosa. Les gustas".

"¿De verdad?" Lin Xiaocha se volvió para mirar al General Zuo.

El corazón del general Zuo dio un salto al ver su rostro tan cerca.

"Sí".

"¿Por qué?

El General dijo con voz ronca, susurrando a Lin Xiaocha para que sólo ella pudiera escuchar: "De hecho, muchos antepasados de los civiles de la Ciudad de Dongling también son refugiados. Mi abuela lo era".

"La mayoría de la gente también simpatiza con los refugiados, pero no se atreve a salir a ayudarlos".

"Después de todo, aquellos que han intercedido con los refugiados han sido ejecutados por el Señor de la Ciudad por diversas razones".

"Inesperadamente, una mujer débil como tú estaría dispuesta a sacrificarse para salvar a otros".

Después de que el General Zuo dijera esto, Lin Xiaocha dijo: "Tal vez soy un poco estúpida. Realmente no pensé tanto. "

Sus palabras le dieron al General mucha emoción, " No eres estúpida. Ser valiente es bueno. "

Lin Xiaocha bajó la cabeza. Su rostro se sonrojó de forma adecuada.

Al oír esto, Han Yu abrió lentamente los ojos y pensó profundamente.

La expresión de la gente de la ciudad hacia Lin Xiaocha hizo que el rostro femenino del Señor de la Ciudad se hundiera al instante.

Nunca había recibido un trato semejante después de tantos años como señor de la ciudad.

Una intención asesina surgió de su corazón, pero Han Yu, que estaba a su lado, también se armó de paciencia.

En ese momento, Han Yu volvió a mirar a Lin Xiaocha débilmente.

El general Zuo estuvo a punto de levantarla del caballo, pero ella no aceptó. Se esforzó por bajar del caballo, y luego sonrió y agitó las manos para despedirse del general Zuo.

Cuando giró la cabeza y vio a Han Yu, sus ojos bajaron rápidamente. Sus delgadas pestañas le cubrieron los ojos, evitando mirarle.

Con un rostro frío, Han Yu no tuvo ninguna expresión. Se fue con la gente que vino a instalarse.

Después de que Han Yu se fuera, el Señor de la Ciudad ya no tenía miedo. Quería matar a Lin Xiaocha inmediatamente.

Caminó detrás de Lin Xiaocha y dijo sombríamente: "Parece que les gustas a estos intocables".

Como si Lin Xiaocha no se hubiera dado cuenta de la intención asesina del Señor de la Ciudad, giró su cabeza y sonrió al Señor de la Ciudad. Dijo: "El señor es realmente sabio".

La comisura de la boca del Señor de la Ciudad se levantó con una mueca. Dijo débilmente: "¿Sabio? ¿Te estás burlando de mí por haberte elegido como sacrificio?"

Lin Xiaocha levantó la cabeza y le miró con ojos extraños: "¿Qué dice el señor de la ciudad? Hacer sacrificios es mi elección voluntaria. Sí, ¿lo has olvidado?"

Señor de la ciudad: ...

Parece ser que así fue.

Entonces levantó las cejas y dijo: "Como no es un sarcasmo, ¿me estás diciendo que soy realmente sabio?".

Lin Xiaocha respondió sin pensarlo: "Los demonios han acosado la ciudad de Dongling innumerables veces cada año. Cada vez, cientos de miles de personas fueron desplazadas. El método del Señor de la Ciudad de sacrificar una vida a cambio de miles de vidas era una medida práctica, pero también era una manifestación de la sabiduría del Señor de la Ciudad."

"Todos los refugiados hemos inundado la ciudad de Dongling, y el señor de la ciudad nunca nos ha expulsado. Ayer, tomó la iniciativa de proponer una oferta aún más misericordiosa de darles gachas durante cien días".

"Así que Xiaocha piensa que el Señor de la Ciudad es inteligente, amable y un héroe sabio".

Lin Xiaocha miró a Feng Ziying con sinceridad.

¿Inteligente y amable? ¿Un héroe sabio?

Feng Ziying ha sido el Señor de la Ciudad durante muchos años, pero era la primera vez que escuchaba a alguien elogiarlo tanto.

Incluso los aduladores mayores que le rodeaban se sorprendieron ante los halagos de Lin Xiaocha. Después de todo, la amabilidad y la sabiduría no tenían nada que ver con su Señor de la Ciudad.

Pero lo dijo sin que su cara se pusiera roja y su corazón no se agitara. Como si fuera la verdad. Les hizo sentirse avergonzados. De hecho, perdieron ante una refugiada.

Estos aduladores no deben dejar que Lin Xiaocha les robe el protagonismo. Se apresuraron a decir: "¡El Señor de la Ciudad es sabio!"

Algunos desconocidos siguieron al grupo de aduladores y saludaron al Señor de la Ciudad: "¡El Señor de la Ciudad es sabio!".

Feng Ziying ya estaba de mal humor.

Pero en ese momento, al escuchar el sonido de los elogios uno tras otro, su estado de ánimo mejoró de repente.

Miró a Lin Xiaocha. Ya no tenía ganas de matarla.

Y se veía extrañamente hermosa. Es una pena matarla.

Así que agitó sus mangas y dijo: "¡Recompensa!"

Luego hizo una pausa y giró la cabeza.

Sistema: [¡Felicidades al anfitrión! El progreso del objetivo Feng Ziying pasó de negativo a positivo 30% en un instante!! 】

S.G.T.T.I.A.A.H.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora