Saturnal [YM]

🌔 🌓 🌒 🌑

Él se encuentra bailando en medio de la pista, las luces se reflejan en él marcando su silueta, la cual combinada con sus movimientos crean un arte corporal masculino inigualable.

Las personas a su alrededor rozan con él ocasionalmente, pero eso no representa ninguna molestia para el chico.
Hoy solo es él y la música.

Nadie sabe quién es, se ha asegurado de ello al escoger un lugar recóndito en la ciudad, además de La Moretta que porta para cubrir su rostro. Es noche de brujas, un disfraz es parte de la celebración. Pero él no lo está usando para festejar, sino para ser un completo extraño ante la gente.

Seguramente la antigua sociedad veneciana debe estar retorciéndose en sus tumbas, pidiéndole a su Dios algún castigo para el joven al usar tal mascara con ese fin, cuando las mujeres de Venecia la portaban para ir a la iglesia, para mantenerse calladas y mostrar el lado más sumun de la feminidad.
Él también pretende guardar silencio esta noche, su danza será su único medio de comunicación.

Algunos quieren acercarse y ser parte de la obra, pero se sienten tan fútiles a su alrededor, porque él no es terrenal. Sin embargo, hay una persona entre ellos, sentada en una de las mesas del lado este, que tiene el valor para acercarse.

Tal vez es La Bauta lo que le da la valentía de hacerlo, o quizás la historia detrás de ella: los hombres en Venecia la utilizaban para ocultar su identidad en los juegos de azar o en sus paseos libertinos. Ellos estarán orgullosos de él si llega a compartir un paseo con lo inalcanzable.

Pasos firmes, uno tras otro.
Si el lugar estuviera en silencio podrían escuchar la decisión en ese caminar.

Son solo cinco pasos los que lo separan, estira su mano para poder tocarlo, hasta que la música cambia, él transforma el ritmo de sus movimientos y se desplaza 10 pasos más. Solo la seda del traje de aquel ser llega a rozar sus dedos, su fragancia llega a sus sentidos y lo hace desearlo aún más

La Bauta decide cambiar la estrategia y utilizar la forma en la que el chico decidió comunicarse hoy con el mundo: el baile.
Tal vez no tenga el talento que La Moretta desborda, pero sirve para llamar su atención.

Comienza con movimientos suaves, pero marcados, escucha la melodía y presta atención a la letra, la cual no puedo describir mejor la situación en esta pista. Gira en su propio eje, cada vez sus pasos son más sueltos y se desplaza por el lugar para acercarse a quién le quitó el aliento desde que entró al establecimiento.

En un punto él ya se encuentra atrás del chico. Los dos de espaldas, bailando con los ojos cerrados, imaginando cómo serían sus vidas si pudieran vivirla de esta manera.
¿Lo mismo pensaban los antiguos venecianos cada vez que celebraban los saturnales?
Esas festividades dónde esclavos y reyes eran iguales y hasta los de clase baja podían ordenarle a sus amos. Vivir la vida de privilegios por lo menos una vez al año. Tal vez, sí. Así se sentían.

De repente, la canción entra al solo de guitarra y La Bauta se da cuenta que es su oportunidad para cumplir su misión de la noche: ser uno mismo con lo imposible
Voltea de reojo para ver si aún se encuentra detrás él cuando alguien lo toma de la mano para hacerlo girar. Ahora no solo la seda está en sus manos, sino todo ese ser

Los dos continúan bailando el último coro de la canción, sintiendo la respiración del otro, imaginando cómo la canción fue escrita para este momento:

There's no turning back
We're strangers in the night
Hold on

Ambos creen que verse a los ojos no es suficiente para la cercanía que sus cuerpos requieren, así que cada uno alza su máscaras cuando el salón se pinta de oscuridad para acercar sus labios y unirlos en eso que llevan deseando toda una vida, un beso.

Tal vez mañana esto solo sea un recuerdo y Yoongi solo se conformara con verlo formado en esas filas portando su traje verde militar deseando acercarse como lo ha hecho hoy. Mientras Jimin vivirá pensando en lo distinto que serían sus vidas si él no fuera teniente y Yoongi su capitán.
Pero hoy los dos coincidieron en este lugar y si sus disfraces no eran la manera en que el universo les gritaba la oportunidad que hoy tenían para crear una reminiscencia, tal vez sus corazones, las miradas y la música lo eran.

Venecia celebra en sus adentros este encuentro, alzan sus copas deseando que este día sea eterno en sus memorias y que algún día no sean necesarias las máscaras para que estas dos almas puedan compartir un paseo.

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