El comienzo

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SER ABSORBIDO POR EL ODIO ANTE TI

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Y TRATAR DE SATISFACER TUS PROPIOS DESEOS

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ES UN CLARO EJEMPLO DE LO QUE ALBERGAMOS EN NUESTRO INTERIOR

Desde que era pequeño tenia a palabras de mi abuelo una gran "particularidad" en mi ya que podía controlar los objetos fríos a mi alrededor mas específicamente hablando el hielo, al momento en que me entere sobre esto me sentí emocionado empecé a practicar y hacer ejercicios de control básico que yo mismo invente era entretenido y muy divertido llenar la casa de mi abuelo de hielo, era genial hasta que. . . murió debido al ataque de unos monstruos quería ir por el cuerpo pero teniendo en cuenta que solo tenia 7 años y además de que el cuerpo había caído por un barranco no era nada descabellado decir que era prácticamente imposible para mi el poder recuperarlo.

Ese día me la pase llorando todo el día por mi debilidad y mi incapacidad de poder hacer algo, para tranquilizarme había decidido caminar  un rato en el trayecto recordaba como mi abuelo quería que fuera un héroe que salvara personas pero lo mas importante tener un ¿Harem? lo que sea que fuera eso, pero la idea de ser un héroe no me llamaba la atención mas bien el salvar personas era lo único que deseaba pero si no podía tan siquiera rescatar el cuerpo de mi abuelo que esperanza tenia de poder salvar a alguien, estaba tan sumergido en mis pensamientos que accidentalmente había chocado con un hombre que vestía un traje formal.

Le pedí disculpas por no fijarme por donde caminaba y el también se disculpo por andar distraído, al parecer el había notado que mis ojos estaban un poco hinchados así que me pregunto si estaba bien, no sabría decir el por que pero algo me impulsaba a contarle lo que me atormentaba, una vez que le había terminado de contar todo se había formado un silencio hasta que el decidió acogerme, le explique sobre mi extraña habilidad a lo que el solo dio una sonrisa, el me dijo que si quería el podía entrenarme a lo cual acepte si podía hacerme mas fuerte no desaprovecharía la oportunidad , también me dijo que había acogido a otro niño que al igual que yo poseía una extraña habilidad de generar flamas azules a lo cual me sorprendí y a su vez me emociones.

Al llegar a su casa el me presento con el otro chico al parecer su nombre era Toya  pero dijo que prefería que lo llamara por su sobrenombre "DABI" a lo que yo igual me estuvimos hablando un rato nos llevamos muy bien incluso me puso un sobre nombre como el "GETEN" me gusto mucho y desde ese día nos empezamos a llamar por nuestros sobrenombres, lo veia como un hermano mayor ya que siempre me cuidaba y pasaba la mayor parte del tiempo conmigo era grandioso.

El conejo de la CriokinesisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora