" Eres un maldito idiota Manjiro Sano ", " No quiero volverte a ver en mi vida ", " ¿Por qué mierda lo hiciste? " Eran las palabras que resonaban en la cabeza de Mikey, ese recuerdo que lo marco de por vida. Volvió a estar solo, y no era de extrañarse después de todo lo que hizo, era irónico para el, lamentarse de lo que él hizo, de lo que él provocó.
Salió a caminar un rato, necesitaba salir de su casa, no podía pensar nada ni siquiera sentir algo, sin darse cuenta estaba en el lugar donde por primera vez vio a Takemichi, la nostalgia que sintió al ver lo mucho que había cambiado. Camino al lugar exacto de su encuentro y sonrió un poco, era más que obvio que extrañaba a su rubio, sabía que no podía volver el tiempo y evitar todo lo que hizo, solo quedaba vivir con el arrepentimiento.
Antes de irse, pudo darse cuenta de que había alguien más en el lugar, al girarse vio a un chico pelinegro,un poco más alto que él, estaba sentado en una banca del parque, con los ojos cerrados y al parecer escuchando música. Abrió sus ojos, tal vez se había dado cuenta de que lo estaba observando, y los vio, esos orbes azules que pudo reconocer en un instante, esa aura tan pura, esa presencia tan alegre, pero esa mirada se veía triste, cómo su hubiese visto algo que lo rompiera.
Quería acercarse para confirmar que era él, pero antes de que pudiera hacer algo, el chico se había ido, ahí fue cuando supo que verdaderamente era él. “ Si me vuelves a ver, finge que no me conoces, olvídate de mí. ” Fueron las últimas palabras que escucho salir de la boca de Takemichi, así que renunció a la idea de buscarlo.
De nuevo empezó a deambular y al parecer termino frente a la casa del, en ese entonces, rubio. Estaba a punto de tocar, pero una voz hizo que se detuviera.
– Detente, ¿Qué mierda haces aquí?– Era de esperarse que el estuviera ahí, después de todo Chifuyu fue el único que nunca abandono a Takemichi.– El te dijo que lo dejaras en paz y que nunca lo volvieras a buscar, ¿Que es lo que quieres? ¿Seguir lastimandolo? Hazle un favor y lárgate.
En ese momento quiso golpearlo, quiso gritarle que dejara de meterse en lo que no le importaba, pero tenía razón, odiaba que la tuviera.
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Cuando Mikey conoció por primera vez a Takemichi, el no era el mismo, tuvo que crearse otra personalidad para ocultar lo débil que era, incluso al punto de volverse insensible, a pesar de que tenía a tantos amigos el se sentía solo, desde que su hermano murió el había cambiado completamente, nunca pudo enfrentar el dolor que sentía, así que solo huía de él, era prisionero de sus propias emociones. Cuando él “ llego ” Manjiro noto que el rubio tenía cierto parecido con su difunto familiar, pensó que lo podía salvar.
Sin darse cuenta ambos de habían acercado mucho, hablaban, reían y se divertían demasiado estando juntos, de un momento a otro los dos empezaron a desarrollar sentimientos de enamoramiento mutuo. Takemichi al darse cuenta de esto, decidió terminar con Hina, no podía estar con alguien a quien no quería, y preferiría terminar con su relación, antes que ambos salieran lastimados.
