kimetsu no Yaiba Mini Historia

huir...

Mis piernas se empezaron a temblar mientras veia a los cuerpos de mis compañeros mutilados en el piso. Uno seguía con vida...

Agonizante estiro su mano hacia a mi, provocandome fuertes ganas de vomitar.

El olor a carne podrida no ayudaba mucho.

-"No puedes hacer nada" -

era una palabra que no dejaba de repetirse en mi cabeza.

El pilar tenía razon... Los cazadores de demonios de esta generacion eran muy debiles ... Yo incluido.

Empeze a correr sin pensarlo dos veces, dejando a mi compañero atras. El mundo giraba a mi alrededor mientras que mi vista se desenfocaba más y más con cada segundo que pasaba.

Mi respiracion empezo a dificultarse con cada paso que daba y sentí un dolor agudo en mi pecho antes de caer estrepitosamente

Sentía que me volvía loco... Incluso cuando intente levantarme, mis fuerzas se desvanecieron por completo.

Tambaleandome me pare en posision de ataque y con la mirada perdida hacía unos arboles pude divisar al demonío que con sus tentaculos habia desmembrado a todos mis compañeros.

Me paralise mientras sentía unas ganas de gritar y un miedo tan fuerte que pense que moriria incluso antes de que me atacara.

El demonío lanzo uno de sus tentaculos a una velocidad exhorbitante hacia donde yo estaba...

-CUIDADO-

Alguien grito detras mio mientras tomaba mis manos con las que sujetaba mi katana. La elevo sobre mi cabeza y empujando la parte superior de la empuñadura ,movio la hoja hacia adelante a una gran velocidad cortando el tentaculo a la mitad.

Me empujo a un lado, causando que callera en el suelo donde, casi por impulso, empeze a arrastrarme hacía un lado.

-estas bien?-

Dijo el chico pelirrojo que me había salvado y mirandome con una sonrisa amable volvio a su ataque.

-DESVAINA TU ESPADA Y PELEA DEBILUCHO-

grito otro con una mascara de jabalí mientras pateaba a un rubio que, llorando, se aferraba a una caja de madera con un color carmesí.

Mire atonito como el pelirrojo desenvainaba su propia katana y la movía a una precision y velocidad increible.

- van a ayudar?-

Dijo, mirando a los dos otros que estaban peleando entre ellos.

El de la cabeza de jabali corrio a toda velocidad con ataques espontáneos hacía el demonío; que cada vez parecía mas desesperado.

Deje mi cabeza caer en el suelo. Fue allí cuando el rubio se acerco a mi.

-estas bien?-

Me dijo con una mirada preocupada, mientras me ayudaba a levantarme.

-VEN DE UNA VEZ DEBILUCHO -

Le grito el jabalí mientras acababa con el ultimo tentaculo del demonío que ya sin exito intentaba escapar.

-YA CALLENSE -

Dijo el rubio, ocultándose detras de la caja de madera. noté que había algo dentro que golpeaba la puerta casi inaudiblemente.

Observe al pelirrojo acabar con el demonio... Era la primera vez que veía compasion en los ojos de un cazador de demonios mientras mataba a su presa... Pero el chico mostro empatía hacia el demonio incluso en sus ultimos momentos.

Puso su mano sobre lo que quedaba de la cabeza del demonio mientras este desaparecía.

-ya esta...-

Dijo, mirando hacía mí, con una mirada mas triste que triunfante.

-te encuentras bien? Tu mirada se ve algo perdida-

Me dijo, extendiendo su mano hacía mi frente

- mi grupo- mi grupo esta bien! Tenemos que ir- tenemos que volver por ellos! -

Dije, intentando creer la estupidez que estaba diciendo

El pelirrojo solo me miro con una mirada de preocupacion y tristeza que cambio rápidamente por una sonrisa un tanto forzosa

-el grupo que estaba mas adentro en el bosque?-

Pauso y miro al suelo evitando, mirarme a los ojos.

- Si!...Si estan bien... despues los veras, pero por ahora debes descansar...-

Por una extraña razon me quería echar a reir, aunque no sentía la mas minima alegria.

-a, eres la persona del grupo que murio a manos de ese dem- -

Pregunto el de cabeza de jabalí, antes de ser golpeado en la cabeza por el rubio.

-ESTAS LOCO?! COMO LO PUEDES DECIRLO ASI COMO ASI!! -

la escena se veía bastante comica a pesar de la situacion... ignorando todo solo seguí a los 3 chicos en silencio con la mente en blanco.