00: Que Comience El Juego

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La luz se filtró por las finas ventanas y los finos rayos de la luna acariciaron su rostro de porcelana, apretó un poco los ojos con molestia, abrió delicadamente sus parpados revelando bellos ojos color dorado con un ligero toque de púrpura, esos bellos ojos simulaban el atardecer. Esos bellos ojos pertenecían a un joven de aproximadamente unos veinte años que poseía un cabello blanco que brillaba más intensamente a la luz de la luna cortado de manera desigual como si alguien lo hubiera cortado al azar con un mechón un poco más largo que el resto de su cabello, se incorporó en la cama haciendo que la sábana de seda se deslizara delicadamente por su cuerpo revelando su pecho desnudo completamente intacto sin ningún tipo de cicatriz.

El joven examinó un poco el lugar donde se encontraba, era una muy lujosa habitación donde usualmente dormiría un millonario. Paredes blancas con toques dorados, algunas estatuas de porcelana de querubines, pinturas de animales, la cama en la que estaba era de un colchón muy suave, las sábanas de seda y almohadas rellenas de plumas.

―¿Dónde estoy? -se preguntó, rascándose levemente el pecho por la zona del corazón.

Se levantó un poco extrañado, estaba realmente extrañado, no entendía porque estaba en ese lugar y desnudo. Lo último que recuerda es que estaba investigando algo en un viejo lugar abandonado y Dazai estaba con él.

Dazai...

―¡Dazai! -exclamó asustado al acordarse de él.

¿Dónde estaba Dazai? ¿Estará en ese lugar también? ¿Algo le pasó?, estaba a punto de buscar algo para cubrirse y buscar a su "mentor" cuando escuchó unos golpes fuertes como si quisieran derribar la puerta, dio un pequeño salto por el susto, nuevamente esos golpes volvieron a sonar. Caminó lentamente hacia donde se escucharon esos golpes, si era el que lo secuestró podría combatirlo con la fuerza del tigre.

Abrió la puerta de manera rápidamente, esperando ver a un enemigo, pero solo era un baño completamente vacío. Igual de majestuoso que la habitación principal. Había un pequeño mueble que tenía su ropa completamente limpia y planchada con una nota. La recogió para ver su contenido.

Bienvenido Atsushi-kun, espero hayas descansado muy bien.

Date una ducha y luego pasa a la sala principal, te están esperando.

Se puntual.

Espero estés teniendo una estancia agradable.

B.

¿Debería confiar en eso? Realmente sí porque estaba en un lugar extraño, sin apoyo y no conocía los motivos del secuestrador y si era usuario de habilidades no tendría idea de cómo enfrentarse a él.

Tomó una ducha rápida, cuando salió se vio en el espejo y al ver su cuerpo libre de toda cicatriz de su pasado se extrañó todavía aún más. Se puso su ropa y salió de la habitación hacia el pasillo, era un pasillo solo iluminado por los rayos de luna lo que le daba un aire un tanto tétrico la verdad; no tenía idea de cómo llegar a la "sala principal" y como si fuera arte de magia apareció un cartel con una flecha de decía exactamente eso, siguió caminando hasta encontrarse con un pasillo que al final tenía grandes puertas que tenía un pequeño letrero neón que decía 'bienvenido'

Con algo de duda abrió las puertas encontrándose con un salón como un club privado con luces tenues, mesas donde se podía conversar, bebidas alcohólicas y música clásica de fondo, siguió caminando hasta ver que la mesa del fondo estaba ocupada, tal vez podría pedirle ayuda a esas personas así que con algo de desconfianza se fue acercando poco a poco y al estar prácticamente frente a ellos solo confirmó que debía estar drogado o realmente se había vuelto loco, había tres chicas y un chico esperándolo, pero lo que pasaba es que eran exactamente iguales a él.

We'll meet again || DazatsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora