martes

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Un nuevo dia comenzaba, esta mañana Mina tenia guardia primero en los jardines cerca de la entrada, luego en los jardines cerca de la cocina, para finalizar en la habitación de la princesa, al menos tenia una razon para esperar la noche, más que solo para dormir.

Mientras en su habitación T/N recien se despertaba y se levanto casi de un salto de la cama emosionada por volver a ver la Pinky, abrio su ventana y se asomo, pero en lugar de la heroína vio lo que parecia ser un hombre de piel cafe, el cual bajo la mirada y T/N entre asustada y confundida cerrando rápidamente la ventana...

-que era eso?- se pregunto así misma confundida-

Aún confundida volteó la cabeza al escuchar su puerta siendo dramáticamente abierta.

- muchas días, buenos gracias hija ¿ como éstas? soy yo ¡¡el rey!! de este hermoso y limpio lugar en el que vivimos, hija te quiero informar varias cosas primero que nada en unos días te coronaremos para ser la nueva reina de este, hermoso y limpio reino en el que vivimos- hablo orgulloso el rey, quien vestía con una elegante traje azul medieval y una capa roja que se arrastraba por el suelo por lo larga que era y sobre su cabeza una Corona que asimilaba el oro llena de piedras preciosas que delicias con la luz artificial que alumbraba la habitación-

-buenos días padre, es un gusto verte, sabrás quería hablarte de algo, noche, como te lo digo...hablo t/n insegura tratando de encontrar las palabras correctas para hablar-

-no me interrumpas- proclamo el rey- lo siguiente, te quiero presentar a dos invitados muy especiales, a la reina del reino vecino que no recuerdo cómo se llama y a su hijo que para nada tiene problemas mentales- siguio el rey mientras a la habitación ingresaban los mencionados-

-hay no puede ser- susurro la princesa al ver a su prometido-

Un joven de cabello color miel, ojos azules y vestido con un traje moderno formal negro.

-saludos princesa t/n, soy la reina Esbetlana y este es mi maravilloso, extremadamento guapo y para nada estereotipado hijo Federico- se presentó la reina-

-hola ¿qué tal?- saludo el hijo de la reina, acercándose la princesa para olerle el cuello y luego volver junto a su madre-

- muchos días, buenos gracias- respondió t/n con algo de incomodidad mientras realizaba una pequeña reverencia, mismo tiempo que trataba de sonreír sin que se viera forzado-

- me alegra que te hayan caído bien retoñito porque, la reina y yo acordamos que te casarías con su hijo quien pidió tu mano... y esa también es otra noticia- volvió a hablar el rey eufórico de alegría-

-que?!- exclamo la chica confundida, para luego voltear a los invitados y volver a tomar postura- em~..bueno mmh~ puede que yo, con todo el respeto del mundo yo... yo lo rechazó- hablo tan fluido como pudo -

-que cosa ¿tu mano?- pregunto el rey sin comprender a lo que se refería su hija, quien respondió-

-no, rechazo su propuesta de matrimonio, papá, no me siento preparado para eso-

-¿y porque no?- volvió a preguntar confundido el rey-

- siento que es mucho para procesar de un solo viaje- explico t/n con cortesía- principalmente porque me acabas de decir que en un par de días me van a coronar y ahora también me estás diciendo que me voy a casar y no obstante, con alguien que se ve que no conoces y mucho menos yo conozco y si me caso con el,  tendré que vivir con él y bueno yo no sé cómo es él papá, podría ser un degenerado- susurro lo último sin mucha discreción a su padre-

- seguimos aquí- entono la reina con algo de disgusto-

-hola- la volvió a saludar la princesa para regresar a ver a su padre-

Mina x tu 《Un cuento de hadas》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora