The Elements Of Shira

Capitulo 38: Mi Abuelo

Shira: Chicos al algo más ha continuación, son dos paginas más del último apunte, al parecer lo última vez que escribió fue 20 años después cuando ella tuvo ha su hijo...

Todos miran con sorpresa has Shira por la expresión de su rostro no dudan en que sea cierto, ella parece inmersa en el diario leyendo con interés y sorpresa las paginas del diario, pero el que esta sorprendido en Anil es una noticia que no puede procesar fácilmente, Kai y se acerca y lo abraza por los hombros para darle su apoyo, Silverio le dice que continúe leyendo en voz.

Shira: Mis Padres del Gran Santuario me presentaron ha un candidato para ser mi prometido cuando tenia 18 años, al principió no podía verlo ha los ojos porque no podía olvidar ha Anil, fue el hombre que cautivo mi corazón y mi primer amor, pero mi prometido se esforzó al máximo para llamar mi atención o por lo menos que fueramos amigos, con cada día que pasaba me fui acercando ha el y comencé ha sentir algo por el, pero también sentía que estaba traicionando ha Anil, pero la cruel realidad es que los dos no podíamos estar juntos, Anil tiene otro camino que recorrer y muy alejado del mio, así que ha los 20 años me case con mi amado esposo, pero cada noche le pedía ha mi Padre el Sol que Anil conozca ha alguien que le ayude ha sanar su corazón cuando se entere de lo que hice, también le pido que llegue ha conocer el amor con otra persona, quiero que el sea feliz como yo lo soy ahora ha lado de mi esposo, cuando cumplí 24 años me convertí en la madre de un sano bebé, mi pequeño hijo es idéntico ha mi, me puse muy feliz con su nacimiento pero cuando lo sostuve en mis brazos por primera vez pude ver una luz dorada en su interior, era el poder de la Princesa De Luz que yo solía tener hace años, fue ahí cuando me di cuenta, cuando llegue el día en que la oscuridad regrese uno de mis descendientes tendrá la sagrada misión de convertirse en la siguiente Princesa De Luz, cuando lo oscuridad reaparezca sus poderes despertarán, confió en mi descendencia para acabar con Dark ha lado de mis queridos compañeros de confianza mis amigos y mi primera familia que tuve, fue un honor pelear ha su lado, espero que sus heridas sean sanadas por la siguiente Princesa De Luz.

Shira termina de leer las últimas paginas del diario, ahora todo tiene sentido para ella, en su sangre corre la sangre de Daila por que es su familia, es descendiente de ella, la verdad lo sospechaba desde la primera vez que vio la pintura pero ahora sus sospechas sean confirmado, ya no tiene ninguna duda en saber quien es, en eso deja el diario sobre la mesa y sale del árbol caminando por una de las enorme ramas hasta llegar ha una parte donde queda frente al sol sobre su cabeza, los chicos algo confusos la siguen, ella esta mirando directo al sol.

Shira: Así que soy tu nieta.

En eso una luz dorada aparece delante de ella, formando la figura humana revelando al mismo hombre encapuchado de la última vez, pero esta vez levanta la cabeza y deja ver su rostro quitandose la capucha, la Deidad Del Sol tiene la apariencia de un hombre de 20 años, cabello esta largo hasta tocar el suelo agarrado en una coleta de color rubio y ojos dorados como ella cuando se transforma, además su piel brilla con una luz dorada, de inmediato los chicos lo reconocen y se arrodillan ante el, estando ha unos pasos atrás de ella, Shira se gira para ver ha los chicos pero de repente es sorprendida por un cálido y acogedor abrazo que la envuelve por completo, mira hacía el frente notando que su Abuelo la estaba abrazando con mucha fuerza, es un amor familiar que únicamente ha sentido con su Padre ese sentimiento le agrada por completo, cierra sus ojos y corresponde al abrazo de su Abuelo, su cabello se suelta por completo hasta tocar el suelo y comienza ha brillar en su color dorado, cuando abre los ojos también han cambiado de color, ambos flotan en el aire y se toman de las manos mientras dan una vueltas en círculos de manera lenta.

Sol: Eres idéntica ha mi hija, eres su viva imagen por eso en cuanto te ve nacer supe de inmediato que parte del alma de mi hija reencarno en ti.