Capítulo 4 (Editado)✓

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POV MATTEO BIANCHE

<Te prometo que nunca volveré a dejar que te hagan daño princesa_ Le hablo dulcemente a la pequeña rubia que llora desconsolada sobre mi pecho .

¿Quién puede alguien lastimar de esta manera a su propia hija? Sólo tiene cinco años ¿Cómo es posible que sus propios padres no la acepten solo por ser diferente?

- ¿Por qué papá me pega? _Dijo entre notables sollozos .

- Porque no valoran lo que tienen princesa , en este mundo te vas a encontrar muchas personas como él . Pero tienes que saber siempre , que eres un ángel y que ser diferente a los demás no te hace rara , sino auténtica .Y sobre todo que siempre tendrás a tu hermano , que te ama con locura y que luchará contra el mundo si es necesario con tal de que tú seas feliz .

Lo más seguro es que ella no entendiera ni la mitad de mis palabras , pero yo estaba seguro que nunca había dicho nada más verdadero que eso en mi vida >

Conducir , sin duda es una de las cosas que más me gustan en la vida . Cuando agarro el volante entre mis manos es como si en vez de sangre , adrenalina corriera por mis venas . Una sensación indescriptible .

Sobre todo cuando conduces acompañado de una buena canción , y cantas a todo pulmón por la carretera . No sé para ustedes , pero para mí es como una especie de terapia .

Recién acababa de salir de casa de esta chica , Lea Taylor . Ella realmente era un dolor de cabeza . Creo que nunca conocí a nadie tan molesto .

Literalmente habíamos estado horas tratando de ponernos de acuerdo , pero ella en serio era imposible . Tuve que dar el brazo a torcer solamente para que se callara.

<Fue por eso ¿O porque te convensió con sus sólidos argumentos? > <Definitivamente debía sacarla de mi cabeza>

Una hora después aparco frente a mi casa , y les juro pasé como veinte minutos para decidir si realmente debía entrar allí o irme a cualquier otra parte .

Finalmente decido bajarme del auto . Pero en cuánto abro la puerta me arrepiento de mi desicion .

<Bienvenidos a mi infierno>

Mi madre estaba sentada en la mesa del comedor , mientras mi padre daba vueltas y vueltas por toda la casa gritándole a todo aquel que le llevara la contraria . Pero eso a ninguno nos sorprendía , Alessandro Bianche siempre ha tenido cosas mejores que hacer que preocuparse por el bienestar de su propia familia .

Siempre ha sido así . Todos los niños tienen un recuerdo feliz con su padre , yo no tengo ninguno . Desde que tengo uso de razón siempre han sido , gritos , golpes y amenazas .

Todo esto empeoró desde hace cinco años cuando nació Mara , mi hermana menor . Ella es una niña especial , tiene síndrome de down y digamos que eso a mis padres , no les gustó nada . Desde que ella nació no han hecho más que maltratarla y hacerla sentir mal .

Mi madre Cassandra Bianche , también tiene lo suyo . Nunca ha sido violenta como mi padre , pero sí una madre ausente . Es diseñadora de modas , y a pasado su vida viajando de un lugar a otro sin importarle ni un poco ninguno de sus tres hijos .

Con Mara es igual que mi padre , para ellos es un estorbo . Ni siquiera la han presentado en sociedad . Todas las personas del mundo creen que el matrimonio Bianche sólo tiene dos hijos Marcelo y Matteo .

Marcelo es mi hermano mayor , igual de hijo de puta que mis padres . Ahora vive en Boston dónde dirige una de las cadenas de hoteles de papá . Jamás viene a visitarnos , pero eso es algo que no me importa , la relación con mi hermano siempre fue pésima. De más está decir que siempre ha sido el favorito de los tres .

In the same hell ( EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora