1~Proposición

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-Creo que son tus favoritas-dijo extendiendo un ramo de orquídeas rosas.

-Gracias Booz, las orquídeas rosas son mis favoritas en todo el mundo- dijo Bruna con una voz fuerte y eufórica.

Booz

Ella va vestida con un vestido rojo ajustado que le llega por en cima de las rollidas, tacones negros de terciopelo, pero lo que más me gusta de ella es su pelo castaño, voluminoso y brillante.

Bruna y yo nos conocemos desde hace unos meses, tenemos un amigo en común, Mateo, a el le encanta Harry Potter así que nos invito a ella y a mi a ir juntos a una cafetería de H.P en Barcelona, allí fue donde nos conocimos, yo creo que ese día me echo armontentia en mi taza de chocolate con trozos de nubes por encima. Ella es una Ravenclaw y yo un Slytherin, seríamos una pareja llena de ambición y de genio.

Es verdad que no es nuestra primera cita pero aún así estoy nerviosísimo, de una vez por todas voy a confesarle mis sentimientos y por eso espero que ella corresponda esos sentimientos y que por fin se convierta en mi novia, me he puesto mi mejor traje para ella!

Bruna

Lleva un traje color azul marino, le va como un anillo al guantes, nunca antes lo había visto tan guapo aún que también debe ser porque me está invitando a cenar a unos de los restaurantes más caros de Barcelona, yo le insistí que no pero el en serio es un cabezota.

-Entramos?- preguntó Booz con una sonrisa resplandeciente.

-Asentí sonriendo con la cabeza.

Los dos entramos a el restaurante, el camarero nos había sentado en la mesa que había reservado Booz hace una semana atrás, todo iba genial, Booz se había pedido unos espaguetis a la boloñesa y yo una lasaña de carne, todo estaba buenísimo. Booz y yo estábamos discutiendo sobre cual era el mejor libro de H.P si el Prisionero de Azkaban o el Principe mestizo, de repente estábamos caminando hacia mi casa, Booz siempre me acompaña después de estar con el.

Booz

Le di mi americana ya que se estaba quejando del frío que hacía y maldiciendo de no haber echo caso a su madre y no haber cogido una chaqueta.
Ya es la hora, estamos en frente del porche de su edificio.

-Bueno, buenas noches- dijo Bruna felizmente.

Ella se estaba girando hacia el portal, hasta..

-Te quiero! Quieres ser mi novia?!- dije medio gritando y avergonzado.

Ella se giró lentamente hacia mi, me miró y de repente se abalanzó sobre mi y me besó, por fin podía saber que sus labios rojizos tienen un sabor a cerezas y una textura más suave que un algodón.

Debió acabar al principioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora