~𝑹𝒊𝒗𝒂𝒍𝒔~

«Capítulo 2»

Narra Cheryl:

Eran únicamente 8 entradas las que haríamos, y estaba dispuesta a humillar a mi rival, además de que mi equipo estaba de acuerdo con ello

Nos pusimos en el campo y pasamos en una fila para saludar al otro equipo, a lo cual se que se vió mal, pero me salté la mano de Kopech y la intercambie por sacar mi dedo medio, se que es algo inmaduro, pero su cara de enfado me reconfortó

Nos tocó adentro primero, y la alineación de bateo era una estrategia para poder vencerlo

al ser la lanzadora siempre le decía a mi equipo lo que conocía de los demás lanzadores, que tuvieran cuidado con los cambios de velocidad, aún más cuando sacaban al lanzador y tocaba uno nuevo, pues era más difícil ya que no se conocía su forma de lanzar, el número 18 en mi playera resaltaba y estaba preparándome relajando mis músculos viendo a lo lejos a Kopech el como lanzaba la bola

Finalmente me tocó batear y estaba lista para hacerlo mirando a Michael con una fulminante mirada y el me miraba a mi, lo quería humillar cuando el bateará y no iba a permitir que el me humillara a mi

Narrador del partido:

-¡Tenemos a Cheryl Blossom en la caja de bateo! La dueña de la pelota, la reina roja, contra su rival de toda la vida Michael Kopech- hablaba uno de los hombres seguido por los gritos de los fanáticos en el estadio

-Bien, este es un momento serio así que veamos lo que sucede- habló otro hombre con la voz un poco más seria

—Es el combate del siglo así que mejor respiren, no hablo de Floyd ni McGregor, hablo de Cheryl y Michael, aquí se detiene el tiempo si sus miradas se miden, en este partido son ellos los que deciden, llegó el momento le cae una gota de sudor, marca al principio como el sonido grave de un "gong" con un simple lanzamiento no cede, aunque es normal que la pruebe, ni un cambio de velocidad le hiere, Cheryl infunde terror —

Se escuchaba hablar a el narrador viendo como Cheryl dejaba pasar las pelotas estás marcándose como bolas llevando así 2 en el marcador, estaba a dos más de que le regalaran la base

—le sobra confianza sigue inmóvil y más fría que el hielo, ni se inmuta a los golpes que parece querer dale Michael, se aleja tranquilamente le está bajando el ego pues ni la está moviendo un centímetro del suelo...

La pelirroja tomó una postura más rígida y apretando el bate con algo de fuerza, pues tenía una estrategia en mente para marcar 2 carreras ya que uno de su compañero estaba en una base

—¡se parte el cielo! Por fin parece que va enserio, los White sox analizan lo que tienen en frente, tras la pantalla se que estás sorprendido hasta tu pero...

El lanzamiento pareció ir en cámara lenta, Cheryl logró golpear la pelota y lanzarla a una gran velocidad

—¡La pelota se va! ¡Es un Home run para los Yankees!

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Narra Cheryl:

La felicidad que tenía en mi rostro era sin duda notoria, pues estábamos 10-0 en el marcador y era la última entrada a lo que en todo el partido me encargue de humillarlos, y me gustaba ver la cara de rabia de ellos

Me puse en posición para lanzar y dejé que pasarán los jugadores, no iba a dejarlos pasar, había roto mi propio récord, en quemar a todos los jugadores en las 8 entradas y solo me faltaba está para demostrar quién mandaba

El último bateador era Michael y me quedé jugando con el lanzandole la bola de diferentes maneras para confundirlo

-(Es mi momento)-dije para mis adentros estando preparada