𝑬𝒔𝒄𝒆𝒏𝒂𝒓𝒊𝒐𝒔 || 𝑻𝒐𝒌𝒚𝒐 𝒓𝒆𝒗𝒆𝒏𝒈𝒆𝒓𝒔

ˢᵃⁿᶻᵘ

𝙱𝙰𝙲𝙺𝚂𝚃𝙾𝚁𝚈

Cómo todos los viernes después de clases, la chica de ojos ____ y cabellera____volvía a su casa, no era algo que le ponía del todo feliz, la rutina diaria en la que se sometía la estaba agobiando, llenando su día a día de estrés, su nombre es_____.

Últimamente éso había cambiado haciendo que a esta chica le sacaran más de una pequeña sonrisa, sus días habían cambiado desde que conoció a aquel chico con el que se escapaba los viernes por la tarde, aquel chico que conocía muy poco, chico de apariencia peligrosa y dudosa reputación...aquel chico de marcarilla que tiene flechada a nuestra chica.

•✦ Sensación de vacío ✦•

Ya habían pasado tres semanas y con ellas, tres viernes que no veo a Sanzu, no tengo su número ni su dirección, no se dónde vive y menos sé dónde está, sabía que involucrarme con él sería mala idea, fuí una tonta al pensar que algo como ésto funcionaría, digo, no nos conocemos lo suficiente y su vida es un completo misterio para mí.

Los rumores dicen que pertenece a una pandilla, dicen que es peligroso y que no dudaría en matar a alguien, quizá tienen razón pero...esa noche, la noche en la que nuestras miradas se cruzaron por primera vez en aquel callejón; pude ver en sus ojos que solo es un simple chico que trata de sobrevivir en este mundo de mirada.

Por una parte somos iguales y por otra somos completamente diferentes, vivimos en situaciones distintas, mundos distintos....aún así ambos queremos escapar de ellos, encontré en él algo que llamó mi atención, algo que nunca había sentido antes; él me hacía sentir libre cada ves que subía a su motocicleta, me hacía sentir adrenalina, él me hacía sentir fuera de este mundo.

Pero ahora todo éso se acabó, al parecer fue algo pasajero, de la misma forma inesperada que apareció en mi vida, se fué de ella, dejando en mí ese inexplicable vacío que me atormentaba día tras día.

Suspiré con desilusión en mis ojos mientras miraba el reloj en la pared de la sala, mis padres estaban por llegar del trabajo y eso solo significaba una cosa, ya no tengo escapatoria, no tengo nada en contra de ellos pero...ya saben, son padres, a veces solo quiero que me escuchen y que me dejen de criticar.

Las horas ya habían pasado y el sueño en mi rostro se comenzaba a notar, me encontraba en mi habitación mirando al techo; de un momento a otro mis ojos se habían cerrado pero se volvieron a abrir al escuchar un pequeño ruido golpear mi ventana, me asomé discretamente por ella encontrándome al chico de mascarilla sentado en el patio de mi casa.

Mi corazón comenzó a latir con fuerza cuando ví como sus ojos se colocaban chinitos; la marcarilla tapaba su boca pero estaba segura que Sanzu me sonreía, tomé la primera sudadera que ví en mi cuarto y bajé las escaleras lo más silenciosa posible, abrí la puerta tracera en dónde aquel chico me esperaba.

-No pensé que estuvieras despierta- susurró el chico frente a mí.-Las niñas buenas se duermen temprano- agregó divertido.

-Estaba durmiendo, pero creo que cualquiera despertaría si le tiran piedras a su ventana- dije en voz baja cerrando la puerta detrás de mí.-Eres consiente de la hora qu...

-Shhhh- me calló posicionando uno de sus dedos en mis labios.-Ven sígueme- susurró tomando de mi mano.

-Sanzu, espera- dije haciendo que se detuviera.-No puedo salir a estas horas de la noche, mis padres....- dije soltando de su mano; las veces que nos habíamos escapado siempre me regresaba antes de que anocheciera.-Podria ser peligro.