No lo podía creer. Sí, justamente estaba frente a frente con un exámen sexista.
—Mi nombre... Hyori, apellido... Choi, edad... ¿De verdad debo contestar esto?... Diecinueve, orientación sexual... Esto es una maldita broma ¿No? Váyase al carajo.
—Eso no es una respuesta —habló detrás de mí el profesor, yo me giré de a poco —Así que ni se le ocurra contestar eso.
—Así que es peor anotar eso que poner aquí —señalé una pregunta y la leí en voz alta —"¿Cuándo fue la última vez que tuviste relaciones sexuales?" ¿Qué se supone que debo responder? "Oh sí, querido profesor, me acosté con un chico la semana pasada y tuve el mejor y más placentero de los orgasmos" y después dejar que usted leyera eso, y sabrá Jesús qué habría hecho después. Es un asco. —Dije enojada y procedí a romper el "exámen" frente a él.
Salí y azoté la puerta detrás mío. Llegué a la calle frente a la escuela y jalé mi cabello con frustración.
—Es que es increíble cómo puede existir ese tipo de personas en este mundo aún, son un maldito asco, una maldita escoria y unos malditos ojetes.
—¿Al menos sabes lo que son los ojetes? —habló un chico que estaba cerca de mí, me giré para mirarlo mejor, sostenía un cigarrillo en una mano mientras la otra la descansaba en su pierna flexionada y recargada en el poste.
—Jamás en mi jodida vida entablaría conversación con alguien como tú. —Dije y me di media vuelta.
—¿Por qué? ¿Por ser hombre? —dijo en tono burlón.
—De verdad no me hables, ni siquiera te conozco. —Caminé un par de pasos.
—Que bueno que jamás hablarías con alguien como yo. —Comenzó a reír. Y yo mejor regresé a la escuela.
Entré a los baños para esconderme el resto de las clases.
Dieron dos horas y yo aún estaba escondida, el tiempo pasó tan rápido que ni cuenta me había dado. Después de tanto tiempo y de una espalda adolorida decidí salir. Por mensaje Sarah me había dicho lo magnífica y asombrosa que fui al enfrentarme al profesor, también me preguntaba dónde estaba y que ella se llevaría mi mochila. Yo no me preocuparía de otra cosa más que de llegar a casa.
—¡Ojete! —hablaron detrás de mí. No me giré, simplemente seguí caminando. —Hey ojete, no me dejes hablando so...
—Te dije que no me interesa interactuar de alguna forma contigo.
—Oh vamos solo dime por qué estabas tan enojada.
—¿Y qué ganaría con decírtelo? —Me paré frente a él y sonrió.
—Tal vez puedas desahogarte y ya no ser tan amargada. —Levantó un Yakult como soborno.
—Que tome el Yakult no quiere decir nada... Un jodido profesor —apunté hacia la escuela —es un enfermo de mierda que siempre está buscando la manera de desvestirnos con la mirada a mí y a las otras chicas. Siempre hace preguntas fuera de lugar y nos obliga a responderlas. Es un jodido enfermo. —Abrí el Yakult y lo tomé. El vago miró la escuela y perdió su mirada en ella. Yo solo miraba su perfil, que cara tan más perfecta. —Y ¿Tú qué? ¿Estudias aquí? —parece que lo saqué de unos pensamientos profundos. Y él simplemente asintió y sonrió, esa sonrisa tan cuadrada estaba colmando mi paciencia.
—¿Cómo se llama? —lo miré con el entrecejo fruncido. —Sí, el profesor, para saber si también me da clase.
—Ah... Pues solo sé que se apellida Kim... En fin, ya me tengo que ir. —Comencé a caminar.
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No sabía que era el director - KTH
RomanceHyori, joven, distraída, feminista y totalmente soltera encuentra el amor con su... ¿Director? Taehyung, joven, director, licenciado y extremadamente atractivo se enamora de una chica que estudia en el instituto en el que trabaja, él lleva enamorad...