Heartbeat [Jungkook & Tn]

3.

Narra Jungkook

Estacioné el auto en el estacionamiento para visitantes del edificio de mi novia y luego bajé de este junto con las cosas que compré para ella en el camino.

Subí en el elevador hacía el tercer piso y luego caminé hacía su departamento para tocar el timbre viendo como ella abrió la puerta segundos después.

-Hola mi amor--dijo sonriente y se acercó a abrazarme

-Huelo a hospital...--dije riendo en medio del abrazo

-No importa, amo que hayas venido

Nos separamos y yo ingresé a su apartamento quitándome los zapatos para dejarlos en la entrada mientras que ella me recibía las bolsas que traía en la mano.

-Oh, compraste vino, me gusta

-¿Cómo te fue en el trabajo?

-Uhm bien, de hecho si es mucho mejor que el anterior

-Eso es bueno, me alegra que te sientas cómodo

-Si

-¿Y a tí? ¿qué tal la escuela?

-Bueno, las primeras semanas de clases son las más fáciles, aunque siempre está ese grupo partícular de chicos que me acaban la paciencia--dijo y yo reí levemente

-¿Vienes com hambre?

-Demasiada

-Entonces ya nos serviré la comida--dijo y besó mis labios rápidamente antes de ir a la cocina de nuevo

-¿Decoraste la sala de nuevo?--pregunté mientras me sentaba en el sofá

-¡Si!--me respondió desde la cocina

Encendí la televisión y me acomodé entre los suaves cojínes mientras que pasaba los canales buscando algo interesante, pues no lo encontré así que solo me fuí a buscar algo mejor en Netflix.

Observé la pequeña mesa enfrente de mi con algunas decoraciones, habían tres portaretratos, en uno está Yeri con su familia el día de su graduación de universidad, en otra está ella con su perro que murió hace un año y en el otro estamos los dos juntos en una foto que nos sacamos en la universidad cuando apenas comenzamos a salir.

Llevamos tres años juntos, recuerdo que solíamos quedarnos estudiando hasta tarde en la biblioteca, yo medicina y ellas sus lecciones de maestría, como a veces nos quedabamos de últimos comenzamos a hablar, luego a salir, y después novios hasta ahora.

Yeri es muy buena conmigo, de hecho siento que congeniamos bien, mis padres la adoran y quieren que sea la mujer con la que me case pero, siendo sincero, cuando una relación dura tanto tiempo las cosas cambian, a veces se vuelve monotonía, o simplemente...ya no es lo mismo que al principio.

-Mi amor--la escuché y la miré desvíando mi atención de mis pensamientos

-Ven, la comida se va a enfriar

Me levanté del sofá y me senté junto a ella en la mesa, tomé la botella de vino que había sacado para luego abrirla sirviendonos en las copas.

-Espero que te guste, hice tu comida favorita tal y como te lo prometí

-Muchas gracias--le sonreí levemente y ella besó mi mejilla

Empezamos a comer y a hablar de ciertas cosas, hasta que llegamos a un tema en dónde todo se puso caótico.

-¿Te gustó la comida?

-Si, estuvo muy rica, en verdad gracias

-Hace meses que no venías a comer aquí