secrets [bajifuyu]

07

Kai

Jamás se enamoro de otra persona que no sea chifuyu siempre creyó que no podría superarlo pero estaba equivocada, también estaba equivocada al creer que era hetero

— ¡Kai tiempo sin vernos! —

Emma, no sabe cuándo paso ni como pero sabía que estaba enamorada de esa chica, como no estarlo era demasiado dulce y linda, odia estar enamorada de personas con las que nunca podrá estar, chifuyu su primer amor creyó que podría intentar algo con el pero estaba equivocada el no la amaba y ahora es emma esa chica estaba enamorada de draken, lo veía en su mirada además siempre buscaba una escusa para estar con el

Emma jamás la amaría

Pero esa chica estaba equivocada

Emma siempre estubo enamorada de Kai a sus ojos ella era perfecta, pero tenía miedo, miedo de las personas, todo el mundo veía a los homosexuales como algo asqueroso y a emma le daba miedo que su familia la mire con desprecio, sus amigos, su abuelo, sus hermanos, Kai.

Las dos creían que la otra la veía solo como una amiga

Pero Kai estaba cansada, cansada de que nunca pueda estar con las personas que quiere así que hoy lo haría, invitará a emma a una cita y le dirá todo lo que siente por ella

— ¿para que querías verme hoy? — preguntó emma

— solo creí que sería bueno salir juntas, ya sabes somos amigos — echando todo a la mierda como siempre

— oh claro deberíamos salir más seguido ¿Sabes? — dijo emma, no se le notaba pero estaba nerviosa, siempre se pone nerviosa con Kai — estar contigo es agradable

Kai se sonrojo y la rubia lo noto cosa que hizo que también se sonrojara

Ahora podrían ponerlas al lado de tomates y no notarían la diferencia

Después de ese momento decidieron ir a jugar en el festival al que fueron

— oye Kai mira ese oso, se parece a los dos osos que me regalaste el año pasado — dijo con clara emoción en sus ojos

— voy a ganarlo — dijo Kai — la parejita ya necesita un bebé

Emma río ante su comentario y la siguió hasta el puesto de juegos

— tome tiene dos intentos — fue lo que escucho emma al llegar

El juego consistía en tirar a los payasos, que se movían, con una pelota

Al primer intento fallo pero la segunda pelota tiro al payaso

— felicidades, elija su premio —

Kai le dió el pequeño osito que era color marrón igual a la parejita que le había regalado hace un año

—muchas gracias Kai —

Kai lo único que hizo fue quedarse mirando los labios de la contraria, el ruido de una campana la saco de su trance y siguieron su camino por los juegos

Las dos chicas iban, inconscientemente, agarradas de la mano

Unos momentos después la rubia si se dió cuenta de cómo iban caminando pero no le importo, no dijo nada. Por primera vez en un largo tiempo mando a la mierda el pensamiento de los demás