Azúl

Capítulo 1

    A pesar de ser un día nublado con probabilidades de lluvia arriba del 40%, para el chico pelinegro con vestimenta primaveral, era algo maravilloso. Le encanta saltar sobre los pequeños charcos de agua aunque sus convers blancas de tela se mojen y ensucien de tierra mojada, al igual que sus calcetines rosas pastel con diseño de gatito y pequeñas orejas peludas sobresaliendo de el borde de estos, dandole un toque tierno.

    El viento frio avisaba la aproximación de las gotas de agua, sin embargo eso no parecía importarle a aquel aniñado chico, que sólo veía pasar a las personas caminando a prisa e incluso corriendo, en busca de un refugio donde resguardarse de la lluvia, con una tierna sonrisa en los labios. Y pese a que solo traía puesto un pescador de color marfil con una camisa a juego amarillo pálido de tela fina, no hacía ni el más mínimo amago de querer ir más a prisa.
    Y por supuesto que no va a mentir, le encanta mojarse con la lluvia.

    Tristemente en este día no corrió con suerte, por más que su andar fuera lento, llegó a su casa sin ninguna gota de agua sobre él, e irónicamente comenzó una torrencial lluvia luego de poner un pie dentro de su solitario hogar. Pero eso no borro su sonrisa, pues podría luego saltar en los charcos de agua y lodo de su patio  trasero.

    Luego de dejar sus convers en la entrada de su casa, para lavarlos más tarde. Se adentro a un pequeño cuarto pintado de verde agua, un lugar muy acogedor, bastante calido y tranquilo, lleno de libros con temáticas distintas cada uno, desde terror hasta romance, y de teorías de la conspiración hasta libros de química, libros de poemas, drama, acción, un sin fin de aventuras, definitivamente un paraíso para los amantes de la lectura, tal cual nuestro tierno y adorable chico.

    Aunque sus vecinos lo vean con lástima por su pasado y lo terrible que fue superarlo, no dejan de tenerle un cariño genuino, todos en ese pequeño vecindario tranquilo lo conocen, no hay nadie en ese lugar que hable mal de él o no le agrade. Varios de sus libros fueron cortesía de ellos, eso hasta que pudo trabajar en una librería, le hacen descuentos y cuando no puede comprarlos, se los prestan, aunque sus vecinos le siguen dando uno que otro libro pese a sus negativas.

    Antes de sentarse fue a su cuarto para ponerse ropa más cálida; una playera blanca de algodón de manga larga, un sueter de lana, y un pans de chándal gris. Tomo una manta de color fucsia con estrellitas plateadas y regreso a su acogedora guarida.
  Una vez adentro tomo un libro que había estado leyendo sobre cosas paranormales, para luego taparse con la manta y sentarse en el suelo.

    Afuera, la lluvia parecía no querer cesar, se veían rayos y centellas iluminar el cielo mezclado entre un gris marengo y serrín. Con cada minuto que pasa todo se va oscureciendo un poco más.

    La noche más fría que de costumbre, no se escucha más ruido que el de las gotas de agua callendo sobre los techos de las casas y el suelo.
  
    Una noche sin dudas muy tenebrosa, aunque no tanto para cierto pelirubio, que caminaba con fastidio por el sendero de aquél bosque, a él ciertamente no le gustaba ensuciarse.
    Su antes pulcro traje negro, ahora era una mezcla de tierra mojada pegada a los talones de su pantalón, en cuanto a su saco y camisa estaban mojados.
    Mataría sin lugar a dudas al responsable de no hacer bien su trabajo, y su traje favorito ahora fuera una bazofia.
    Por qué, vamos, no era difícil o cosa de otro mundo deshacer una insignificante evidencia. Pero al parecer, el inepto a quien mando es un completo incompetente que no saber hacer ni eso. Ya luego se encargaría de él.

    Soltó un sonoro suspiro cuando llegó al lugar, esta sería una noche larga...

 

 

Portada y banner hechos por una hermosa personita Kibushoto09

Gracias