La habitación de Harry estaba sumida en completo silencio, lo cual le sorprendía bastante. Normalmente sus damas de compañia solían hablar sin parar de cosas en ocasiones sin importancia, o incluso absurdas. Les miro mientras arqueaba una ceja, recién había llegado de una reunión y a pesar de que estaba cansado le preocupaba que algo les hubiese pasado a las dos mujeres frente a él.
-¿Sucede algo?
Se ánimo a preguntar mientras arqueaba una ceja con suavidad, la castaña y azabache apretaron sus labios. No sabían si debían decirle o no, lo último que querían era causarle problemas o molestias al joven de ojos esmeraldas. Pansy soltó un suspiro mientras se rendía y asentia.
-El Emperador Tom regreso, emperatriz.
-¿Y eso tiene algo de inusual?
-No... Lo que pasa es que.
Hermione suspiro mientras negaba un poco, ella tampoco quería callar. Estaba preocupada por la situación en la que se estaban encontrando, no sabía que podría pasar. O cual sería la reacción de su emperatriz.
-El emperador trajo a una chica con él... Estaba completamente sucia... Y parecía enferma.
-Les pidió a varios sirvientes que le ayudarán, pero como todos tenían cosas que hacer nos ordenó a nosotras que le diéramos un baño.
Murmuro pansy a la vez que hacia una mueca, ellas se suponía que solo debían servir a la emperatriz. Solo cuidaban de ella y le ayudaban con las duchas, o los vestuarios. Es por ello que se sintió completamente ofendida cuando el emperador les ordenó eso.
-Así que una chica.
-Si, una esclava para ser más precisas.
-No entiendo, me da mala espina esa chica... Tiene cara inocente pero yo ese cuento no me lo trago.
Casi gruño Pansy mientras apretaba sus manos con furia por el comportamiento del emperador, ni siquiera con su emperatriz era tan atento. Harry suspiro suavemente y después les sonrió.
-No se preocupen, él Emperador es muy compasivo, seguramente por eso la trajo.
Les aseguró con una sonrisa, aunque por alguna razón Harry sentía que les estaba mintiendo.
Ese día Harry tenía una comida con el emperador, solían reunirse dos veces o a veces tres veces por semana para compartir algunas comidas o cenas. A pesar de que el azabache quería dejar de pensar en el asunto de la esclava no podía hacerlo, desde que sus damas de compañia le hablaron de la chica no pudo alejar el tema de sus pensamientos. Subió su mirada al hombre frente a él, quien le miro arqueando una ceja, sabía que quería preguntarle algo.
-Emperador, escuche que trajo a una esclava después de su viaje de cacería, ¿no es así?
Este apretó sus labios a la vez que su mirada cambiaba, Harry sabía que significaba esa mirada. Pero al parecer su curiosidad era un poco más grande.
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The Empress
FanfictionEl Imperio se sorprendió cuando recibieron la noticia, el emperador había llevado una amante. Todos sentían pena por Harry, pues su puesto como emperatriz podría verse en peligro. Sin embargo Harry le demostraría al Emperador, que no se dejaría apl...