El Imperio se sorprendió cuando recibieron la noticia, el emperador había llevado una amante. Todos sentían pena por Harry, pues su puesto como emperatriz podría verse en peligro.
Sin embargo Harry le demostraría al Emperador, que no se dejaría apl...
Harry miraba con atención a la chica frente a él, quien no dejaba de sonreírle a la par que apretaba sus manos sobre el vestido que en aquellos momentos portaba. No sabía que decir, ni siquiera sabía de quien se trataba o que hacía en el palacio.
-¿Umm?
La chica se acercó ligeramente más al azabache a la par que la sonrisa se iba borrando levemente poco a poco. No sabía si había hecho mal, pero estaba segura de que la emperatriz querría conocerla.
-Mucho gusto, Ginny.
Fue lo único que dijo este a la par que daba media vuelta para poder retirarse de aquel lugar. Más un jalon en la manga de la camisa que portaba en aquellos momentos le hizo jadear sorprendido. Un sonido ligero de desgarre se escucho, ya que por como le había jalado la manga esta se había roto. Iba a hablar, sin embargo Hermione se acercó rápidamente dando un ligero golpe en la mano de la pelirroja, quien soltó un ligero quejido por aquella acción.
-¡Pero que insolencia! ¿Que no sabes quien es? Es su Majestad, la emperatriz.
Exclamó la castaña seriamente mientras Harry miraba a ambas algo fatigado. Ginny mordió su labio levemente a la par que retrocedía.
-Se que es su Majestad emperatriz... Pero quería llamarlo y no sabía cómo.
Ante esto el azabache suspiro a la par que asentia tratando de ser algo benévolo con ella. Después de todo ni siquiera sabía aún por que estaba allí hablándole.
-Llamame “Su Majestad, la emperatriz”.
-¿Eh? Es que... Pensé que como nos veríamos seguido podría llamarle distinto...
-¿Vernos seguido?
-Estoy en deuda con su Majestad el emperador, quien me permite estar aquí mientras me recuperó por lo que pensé que podría ser cercana a usted...
-Oh, eres la esclava.
Comentó con simpleza el oji esmeralda mientras les miraba, por lo que las mujeres que iban con Ginny se apresuraron en hablar.
-Lamento interrumpir majestad, pero lady Ginny no es una esclava.
Ante eso Harry parpadeo ligeramente confundido, sus damas de compañia le habían dicho que lo era. Más no dijo nada, solamente asintió sin demasiadas ganas de discutir sobre ello, pues no le importaba mucho en realidad.
-Bueno, ya sabes como debes llamarme.
Nuevamente se dio una vuelta para retirarse, más la pelirroja parecía no rendirse por lo que intentó acercarse a jalar de nuevo a la emperatriz. Un nuevo golpe resonó, pansy había golpeado a esta en la mano mientras negaba.
-¡Deja de ser igualada! ¡Respeta a su Majestad, esclava!
-¿A quien llamas esclava?
La voz del emperador llamó la atención de todos, incluso de Harry quien solo volteo para ver como Tom corría hacia Ginny quien sollozaba por el golpe. Harry apretó sus labios mientras desviaba la mirada, no le gustaba ese sentimiento... No le gustaba ver a Tom siendo cariñoso con aquella chica, pero no estaba obligado a ver aquella escena.
-Con su permiso me retiro, me duelen los pies.
Comentó empezando a caminar para poder retirarse del lugar, junto a sus damas de compañia que iban detrás de él. Pero antes de que pudiera avanzar más el llamado del emperador le hizo voltear.
-Emperatriz.
-¿Si?
-Esa dama de compañia...
Habló señalando a Pansy quien apretó sus labios completamente nerviosa sin saber que pasaría. El de lentes miro a esta para después mirar a su esposo mientras arqueaba una ceja.
-¿Que pasa con ella?
-Necesito que la deje aquí, conmigo.
Explicó con un tono de voz algo serio y de cierta forma frío, por lo que Harry solo pudo apretar ligeramente los labios. Sabía que querría regañar y castigar a Pansy por lo que le dijo e hizo a Ginny, pero si lo hacia solo la humillaria, tanto a ella como a él.
-Solo si me dice para que la necesita.
-No le incumbe.
Habló poniéndose de pie dejando a Ginny aún en el suelo con las damas de compañia, pues esta se había agachado en un intento de parecer más vulnerable. Hubo un contacto visual entre ambos mientras todos los demás le miraban, por lo que Harry solo sonrió.
-Entonces no puedo dejarla.
-Soy el emperador, obedezca.
-Y yo soy la emperatriz, y ella es mi dama de compañia... Como no me quiere decir para que la necesita me niego a su petición.
Concluyo Harry con voz firme mientras miraba al emperador, este apretó los labios completamente molesto.
-Debo de darle un castigo... Por lo que le hizo a Ginny.
El azabache no pudo evitar dar una ligera risa mientras negaba por el motivo. Esperaba estar equivocado, pero al parecer Tom era demasiado evidente.
-Me vuelvo a negar a su pedido emperador.
-Pero, ¿que?
-Si espera que deje a mi dama de compañia por decir aquello esta equivocado, ella solo cumplió con su deber... Que es cuidar de mi, al contrario debería de enseñar a su acompañante a respetar a la emperatriz.
Y después de aquellas palabras dando una reverencia leve Harry se retiró con paso firme junto a Pansy y Hermione. Él emperador estaba completamente molesto, por lo que apreto sus manos en puño.
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Al llegar a la habitación Harry se sentó en su sofá para después dejar salir un sollozo. Se mantuvo firme ante el emperador, pero le dolía todo lo que pasaba. Tom prefería a una esclava que a su esposo, aquella mujer ni siquiera era su amante aún pero parecía que era más importante que él.
Durante esa tarde Hermione y Pansy se dedicaron a subirle el ánimo, mientras Harry solo podía sentir su corazón herido.
