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Me llamo Katheryn, y no, no soy la típica chica adolescente, tengo 16 años, vivo en California desde hace unos años, ya empece mi universidad, quizás sea algo joven para estar en la universidad pero me considero muy juiciosa, vivo con mis padres y mi hermano menor Josh, algún día llegue a querer una relación como la de mis padres, pero siempre llega ese momento en el que no quieres saber nada del amor, y te das cuenta que no todo es como los libros lo dicen.


Ya empieza mi segundo semestre en la univeridad, estudio negocios internacionales, me gusta la manera en que pasan los días en mi universidad, es cálida pero a la vez muy tranquila, soy de pocos amigos así que solo tengo a mis dos amigos Amber y Cristhian, son prácticamente lo único que tengo en California, ya que mis padres trabajan y Josh, bueno el es muy pequeño y es como si nunca estuviera ahi, ademas de que mantiene jugando con sus amigos, si, es estresante, cuando yo era pequeña no era asi, casi no salia, como ya dije antes soy de pocos amigos, y siempre decían que yo era muy creída aunque no fuera cierto, después crecí y esos juegos de niños me dejaron de gustar, solo quería pensar en mi estudio y escuchar música cada que podia.


Encontrar una solución rápida y buena para mis problemas casi nunca sucedia, en realidad casi nunca podía solucionar mis problemas solo me dejaban de importar y así dejaban de ser problemas.

Llegar a tu casa y encontrarla sola no es muy bueno que digamos, a veces me hace falta quien se preocupe por mi, y me pregunte cosas como ¡Hey! ¿Como te fue hoy? O ¿Que tal tu dia? ¿Quieres hablar conmigo? ¿Necesitas algún consejo? Pero no, nunca fue asi, siempre que llegaba la casa estaba sola, era bastante amplia, siempre encontraba mi comida en el microondas, Josh estudiaba casi todo el dia, y cuando no lo hacia estaba en la calle con sus amigos, todavía no logro entender como mis padres no son capaces de regañarlo, ah, claro mis padres, ellos trabajaban ¿Para mi? Todo el dia, todos los días de la semana, los veía solo los domingos pero era para decir ¡Buenos dias, tenemos una reunión de urgencia hoy, dejamos comida en el refrigerador, nos vemos en la noche, cuida de tu hermano! Eso era básicamente lo que me decían cada domingo ¿En serio? ¡Era un domingoo! ¡Un puto domingo que ya no valía ni mierda! No esperaba que fuera como los de mis amigos, ellos no salían los domingos porque decían que los domingos era día familiar, esperaba por lo menos una mañana familiar, o una cena en familia por lo menos una vez por semana, pero la verdad nunca fue asi, ya me acostumbre y no podía hacer nada.

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⏰ Última actualización: Apr 17, 2015 ⏰

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